¡Felicidades, "decanos"!

Llegaron una hora antes de que se iniciara la práctica. Lucas Ischuk, César Montiglio, Martín Granero y Luis Miguel Rodríguez aceptaron levantar las copas con champagne para desear que 2009 llegue con más éxitos que 2008, y para que toda la familia "decana", al igual que los habitantes de la provincia, tengan un próspero Año Nuevo.
"Cumplimos con el objetivo que nos habíamos propuesto, que era lograr el ascenso a la Primera ?B? Nacional. Ahora conformamos un equipo de gran nivel con el que pelearemos cosas importantes porque somos fuertes en lo deportivo y en lo humano", destacó Ischuk, que fue elegido "El Jugador del Año de Atlético" por la página clubatleticotucuman.com, el sitio oficial de los "decanos".
El "Vikingo" está disfrutando del buen momento del equipo, pero reconoció que quiere mucho más. "Queremos terminar este certamen de la mejor manera posible. Si es con el ascenso a Primera, mucho mejor. De todas maneras, peleamos para que esta sea una campaña inolvidable", comentó Granero.
Montiglio no se olvida de lo que ocurrió, pero se preocupa más por el futuro. "En nuestro debut en la categoría fuimos de menor a mayor. Apostamos a repetir los éxitos que cosechamos en esta primera rueda. Si eso es así, no tengo dudas de que podremos pelear por el ascenso", explicó el futbolista que sólo se perdió uno de los 19 encuentros que disputaron los "decanos" durante todo el certamen.
El "Pulga" Rodríguez fue el que pidió por todo el plantel. "Espero que 2009 llegue con un festejo importante que, si Dios quiere, será el ascenso a Primera. También pido que no haya lesiones en el plantel para lo que nos queda por jugar", imploró el delantero.
Ischuk, uno de los líderes silenciosos de Atlético, analizó que una de las virtudes de este equipo es que cuenta con una base sólida. "Los jugadores, el cuerpo técnico, los asistentes médicos, los utileros y los hinchas estamos empujando para el mismo lado. Esa es la mejor fórmula a la que podemos recurrir para lograr dar otra vuelta olímpica", concluyó.
Los cuatro futbolistas, que formaron parte del equipo que logró ascender a la "B" Nacional, levantaron las copas y las hicieron chocar suavemente en el aire. Las tribunas del Monumental fueron testigos de los deseos de los jugadores. Son los mismos que mantienen, desde hace varios años, todos los hinchas "decanos".