Empleados de las AFJP salieron a la plaza Independencia en defensa de su trabajo

Los empleados de las oficinas tucumanas de las AFJP no ganan para sustos. La reforma previsional del año pasado produjo un viraje masivo de los ahorros de los afiliados del régimen privado al de reparto; la crisis financiera internacional actual depreció tenazmente los activos que las administradoras invirtieron en papeles, y como remate, el Poder Ejecutivo nacional ayer dispuso la universalización del sistema de jubilación estatal.
La pregunta que se hacen es qué va a pasar con sus fuentes de trabajo, sobre todo, teniendo en cuenta que este sector -unos 200 trabajadores, en Tucumán-, a pesar de los 15 años de vigencia del sistema, no posee representación sindical. “Esto es un robo al bolsillo del trabajador, que debe saber que el dinero no es ni del Estado ni de las AFJP, sino suyo. Esto es como otro corralito”, dijo Federico Diez Ojeda, empleado de Consolidar, durante una protesta que un grupo de empleados de AFJP realizó anoche en la plaza Independencia.
Los trabajadores tucumanos del sector se llamaron ayer por teléfono y se autoconvocaron para realizar la protesta, que coincidió con la marcha que desde hace un año y medio realiza los martes Alberto Lebbos, en reclamo de justicia por el crimen de su hija, Paulina. Los empleados aprovecharon la ocasión para convocar a una nueva protesta mañana a las 19 en el mismo lugar. “Hay un rechazo generalizado por lo arbitrario, por lo compulsivo de esta medida. Hubo una ley el año pasado y ahora porque necesitan plata se van a quedar en la calle 13.000 personas”, se quejó Fabiana Sequeira. “Es una mirada sobre las AFJP de corto plazo. Pero el sistema funciona a largo plazo. Nos preparamos para trabajar en esto. Ahora, con suerte, vamos a pasar a ser administrativos en la Anses”, aseveró Leonor Giménez Lascano. Los trabajadores dijeron hoy irán a trabajar normalmente porque no recibieron ninguna directiva al respecto. Comentaron que ayer recibieron muchas consultas de afiliados respecto del futuro de sus ahorros. Los trabajadores afirmaron también que durante los últimos días varias administradoras concretaron despidos de personal, como en Máxima, por lo que sospechan que conocían de antemano la medida del Gobierno.
“Este es otro manotazo de un gobierno que está permanentemente sediento de fondos, que ahora recurre a la plata de los jubilados para su caja”, bramó Carina Serrano, empleada de Máxima.

Opinan los tucumanos

“La medida es importante porque se refuerza el sistema jubilatorio. Privatizar lo que debe ser estatal nunca está bien. Menem lo hizo”. (Rosario Parada Parejas, trabajadora social, aportante del sistema de reparto)

“Estoy aportando a reparto, pero no creo que la medida sea la adecuada. Por empezar, muchísima gente va a quedar sin trabajo”. (Ana Fuentes, empleada de comercio)

“En 1993 me di con que me habían pasado compulsivamente a una AFJP. Peleé y al mes siguiente ya estaba en reparto de vuelta. Nunca me cerró la idea de la AFJP y sabía que algún día iba a pasar esto que pasa ahora. La jubilación debe ser estatal. El Estado no se va a fundir nunca. Te va a pagar mal o bien, pero te va a pagar”. (Jorge Barraza, empleado de la UNT)

“Lamentablemente este gobierno necesita caja y vuelven a llevarse la plata de los que menos tienen. Todo es muy improlijo. Hacen lo que se les da la gana” (Néstor Correa, empleado de comercio, aportante del sistema de reparto)

“Hace ocho años que trabajo y siempre estuve en AFJP. Tengo en mi cuenta de capitalización $ 4.500, entonces no me preocupo demasiado por esto. Después de todo, en cualquiera de los dos sistemas van a hacer lo que quieran con tus aportes”. (Martín González, empleado)

“Si hay algo de lo que estoy seguro es de que el Gobierno no hace esto porque sea bueno. A la Presidenta no le importa lo que va a pasar con las jubilaciones nuestras. Está viendo de dónde va a sacar plata. Eso es todo. Si hubiese querido eliminar las AFJP lo hubiera hecho el año pasado, junto con la reforma previsional. Lo peor es para los empleados de las AFJP”. (Nicolás Abregú, trabajador independiente, aportante al sistema de capitalización)