06 Agosto 2008
El médico que decidirá si Bussi puede comparecer lo examinará mañana
"Como miente tanto, nadie sabe cuándo dice la verdad", dijeron los hijos del desaparecido. Gerónimo Vargas Aignasse les pidió a los jueces que sean cuidadosos. Ricardo Bussi aseguró que su padre está extenuado y que no se encuentra en condiciones de comparecer. No hubo parte médico. Videos.
LOS DOS IMPUTADOS. Menéndez, a la izquierda, y Bussi, con bastón y una cánula nasal de oxígeno, a la derecha, antes de que comenzara la audiencia. LA GACETA / JUAN PABLO SANCHEZ NOLI
Un profesional del Cuerpo Médico Forense de la Corte Suprema de Justicia de la Nación llegará mañana para examinar a Antonio Domingo Bussi y para determinar cuándo puede volver a comparecer en el histórico primer juicio oral por violaciones a los derechos humanos durante la última dictadura militar en Tucumán.
El médico José María David confirmó telefónicamente que ya solicitó que el ex gobernador, quien desde ayer permanece internado en un centro privado de cardiología, sea sometido a una serie de estudios. Durante toda la mañana, decenas de periodistas se esperaron novedades sobre su estado de salud en la puerta del sanatorio. Pese a ello, aún no se conoció un parte médico oficial.
David estuvo el lunes en esta capital (se fue esa misma noche), oportunidad en la que revisó al militar retirado y concluyó que estaba en condiciones clínicas de asistir al juicio oral, cuya primera audiencia quedó inconclusa ayer porque el acusado adujo fuertes dolores de pecho. Por eso, el Tribunal Oral en lo Criminal Federal dispuso un cuarto intermedio hasta el viernes, a las 9.30.
El estado de salud de Bussi genera incertidumbre acerca del futuro del juicio, teniendo en cuenta que el Código Procesal Penal de la Nación establece que, una vez abierto, sólo puede ser suspendido por un término de hasta 10 días hábiles si, por ejemplo, uno de los imputados se enfermara.
Si el doctor determinara que, por sus afecciones cardíacas, Bussi debe permanecer internado durante un tiempo mayor al que fija el Código Procesal, el Tribunal tendrá que determinar si aplaza el juicio o si sólo continúa con el otro imputado, Luciano Benjamín Menéndez.
En Argentina no es posible que una persona sea juzgada penalmente en su ausencia, razón por la que la audiencia de ayer era fundamental, ya que en ella debía quedar fijada la acusación que pesa sobre los acusados para que estos puedan defenderse y, finalmente, emitirse una sentencia válida.
Mientras eso ocurría en el sanatorio, los hijos del desaparecido senador Guillermo Vargas Aignasse advirtieron que deben ser tomados todos los recaudos para evitar que la internación de Bussi sea una estrategia para dilatar el proceso.
"Esperamos que la Justicia le otorgue todas las garantías para que pueda defenderse como corresponde. Pero advertimos a los jueces que deben ser muy cuidadosos, porque estamos en presencia de un profesional experto en eludir responsabilidades", expresó esta mañana el diputado nacional Gerónimo Vargas Aignasse.
En declaraciones a la agencia de noticias Télam, el legislador añadió: "como miente tanto, nadie sabe cuándo dice la verdad". En el mismo sentido, su hermano, Guillermo Vargas Aignasse (quien tenía nueve años cuando su padre desapareció) recalcó: "queremos que Bussi tenga larga vida para que sea juzgado con las debidas garantías y para que pueda ejercer plenamente sus derechos de defensa".
Desde la vereda de enfrente, el legislador Ricardo Bussi aseguró este mediodía que su padre se encuentra extenuado porque pasó una mala noche, tras el esfuerzo que le demandó la primera audiencia. "No está en condiciones de salud para poder comparecer el viernes", sentenció.
Lo cierto es que los avatares en torno del estado de salud de Bussi marcaron la trascendente audiencia inaugural, que debió ser interrumpida luego de que un médico diagnosticó que correspondía internar al ex mandatario de facto -adujo fuerte dolor de pecho- y someterlo a una serie de estudios cardiológicos.
Esto impidió que terminara la lectura de la acusación que pesa contra el militar retirado y contra Menéndez por la desaparición del ex senador Vargas Aignasse, en 1976. Como consecuencia, los vocales Gabriel Casas, Carlos Jiménez Montilla y Josefina Curi requirieron la intervención de David, para que informe cuándo Bussi puede comparecer nuevamente.
Ayer, fuera de la sede del tribunal hubo cruces verbales entre bussistas y militantes de organismos defensores de los derechos humanos. En el recinto, parte del público exhibía pancartas con imágenes que recordaban a los desaparecidos. En una ocasión, el juez Casas se vio obligado a llamar al orden cuando, luego de haber dispuesto un cuarto intermedio, les gritaron "asesinos" a Bussi y a Menéndez. LA GACETA ©
El médico José María David confirmó telefónicamente que ya solicitó que el ex gobernador, quien desde ayer permanece internado en un centro privado de cardiología, sea sometido a una serie de estudios. Durante toda la mañana, decenas de periodistas se esperaron novedades sobre su estado de salud en la puerta del sanatorio. Pese a ello, aún no se conoció un parte médico oficial.
David estuvo el lunes en esta capital (se fue esa misma noche), oportunidad en la que revisó al militar retirado y concluyó que estaba en condiciones clínicas de asistir al juicio oral, cuya primera audiencia quedó inconclusa ayer porque el acusado adujo fuertes dolores de pecho. Por eso, el Tribunal Oral en lo Criminal Federal dispuso un cuarto intermedio hasta el viernes, a las 9.30.
El estado de salud de Bussi genera incertidumbre acerca del futuro del juicio, teniendo en cuenta que el Código Procesal Penal de la Nación establece que, una vez abierto, sólo puede ser suspendido por un término de hasta 10 días hábiles si, por ejemplo, uno de los imputados se enfermara.
Si el doctor determinara que, por sus afecciones cardíacas, Bussi debe permanecer internado durante un tiempo mayor al que fija el Código Procesal, el Tribunal tendrá que determinar si aplaza el juicio o si sólo continúa con el otro imputado, Luciano Benjamín Menéndez.
En Argentina no es posible que una persona sea juzgada penalmente en su ausencia, razón por la que la audiencia de ayer era fundamental, ya que en ella debía quedar fijada la acusación que pesa sobre los acusados para que estos puedan defenderse y, finalmente, emitirse una sentencia válida.
Mientras eso ocurría en el sanatorio, los hijos del desaparecido senador Guillermo Vargas Aignasse advirtieron que deben ser tomados todos los recaudos para evitar que la internación de Bussi sea una estrategia para dilatar el proceso.
"Esperamos que la Justicia le otorgue todas las garantías para que pueda defenderse como corresponde. Pero advertimos a los jueces que deben ser muy cuidadosos, porque estamos en presencia de un profesional experto en eludir responsabilidades", expresó esta mañana el diputado nacional Gerónimo Vargas Aignasse.
En declaraciones a la agencia de noticias Télam, el legislador añadió: "como miente tanto, nadie sabe cuándo dice la verdad". En el mismo sentido, su hermano, Guillermo Vargas Aignasse (quien tenía nueve años cuando su padre desapareció) recalcó: "queremos que Bussi tenga larga vida para que sea juzgado con las debidas garantías y para que pueda ejercer plenamente sus derechos de defensa".
Desde la vereda de enfrente, el legislador Ricardo Bussi aseguró este mediodía que su padre se encuentra extenuado porque pasó una mala noche, tras el esfuerzo que le demandó la primera audiencia. "No está en condiciones de salud para poder comparecer el viernes", sentenció.
Lo cierto es que los avatares en torno del estado de salud de Bussi marcaron la trascendente audiencia inaugural, que debió ser interrumpida luego de que un médico diagnosticó que correspondía internar al ex mandatario de facto -adujo fuerte dolor de pecho- y someterlo a una serie de estudios cardiológicos.
Esto impidió que terminara la lectura de la acusación que pesa contra el militar retirado y contra Menéndez por la desaparición del ex senador Vargas Aignasse, en 1976. Como consecuencia, los vocales Gabriel Casas, Carlos Jiménez Montilla y Josefina Curi requirieron la intervención de David, para que informe cuándo Bussi puede comparecer nuevamente.
Ayer, fuera de la sede del tribunal hubo cruces verbales entre bussistas y militantes de organismos defensores de los derechos humanos. En el recinto, parte del público exhibía pancartas con imágenes que recordaban a los desaparecidos. En una ocasión, el juez Casas se vio obligado a llamar al orden cuando, luego de haber dispuesto un cuarto intermedio, les gritaron "asesinos" a Bussi y a Menéndez. LA GACETA ©
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