30 Julio 2008
EXPLICACIONES. El secretario de Defensa de EEUU tuvo que brindar una conferencia de prensa sobre el ataque cibernético al Pentágono. REUTERS
LONDRES, Inglaterra.- Un ciudadano británico acusado de haber hackeado el sistema informático del Pentágono será juzgado en Estados Unidos tras perder su recurso de apelación para evitar ser extraditado a ese país.
Gary McKinnon, de 42 años, intentó no ser enviado al país norteamericano -que lo acusa de haberse introducido en sus computadoras militares y en las de la NASA- y llevó su caso al máximo tribunal británico, la Cámara de los Lores.
Sin embargo, cinco jueces rechazaron hoy su apelación, por lo que McKinnon, alias "Solo", será extraditado a Estados Unidos para responder por lo que el fiscal del caso ha llamado el mayor ataque informático militar de todos los tiempos.
El hacker, que podría recibir la cadena perpetua, admitió que entre 2001 y 2002 penetró en el sistema informático del Ejército, la Marina, el departamento de Defensa y en la Fuerza Aérea estadounidenses desde el dormitorio de una casa londinense, propiedad de la tía de su novia. McKinnon nunca fue juzgado en Gran Bretaña, cuyos tribunales dieron luz verde a su extradición en 2006. (AFP-NA)
Gary McKinnon, de 42 años, intentó no ser enviado al país norteamericano -que lo acusa de haberse introducido en sus computadoras militares y en las de la NASA- y llevó su caso al máximo tribunal británico, la Cámara de los Lores.
Sin embargo, cinco jueces rechazaron hoy su apelación, por lo que McKinnon, alias "Solo", será extraditado a Estados Unidos para responder por lo que el fiscal del caso ha llamado el mayor ataque informático militar de todos los tiempos.
El hacker, que podría recibir la cadena perpetua, admitió que entre 2001 y 2002 penetró en el sistema informático del Ejército, la Marina, el departamento de Defensa y en la Fuerza Aérea estadounidenses desde el dormitorio de una casa londinense, propiedad de la tía de su novia. McKinnon nunca fue juzgado en Gran Bretaña, cuyos tribunales dieron luz verde a su extradición en 2006. (AFP-NA)