23 Julio 2008
Buenos Aires.- Más allá de las grietas que abrió el fracaso oficial por las retenciones en el seno del Frente para la Victoria, la mayoría de los diputados díscolos permanecerá en el redil oficialista, por lo menos hasta que le Cámara Baja retome su actividad la primera semana de agosto.
Pese a que la santiagueña Marta Velarde ya confirmó que conformará un monobloque, el resto de los disidentes aguardará un poco más antes de definir su salida del oficialismo. El poderío del Frente para la Victoria -hasta ahora nunca cuestionado en la Cámara Baja- se vio seriamente perjudicado por las esquirlas que dejó el conflicto del agro y el fuerte golpe que el oficialismo sufrió en el Senado. Si bien el jefe de la bancada, Agustín Rossi, logró -entre propios y aliados- que Diputados hiciera la voluntad de la Casa Rosada con el proyecto de retenciones móviles, la cuestión propició que se resquebrajaran sus filas y se perdieran por el camino a varias de sus principales figuras. Quince legisladores optaron por el no a las retenciones. A la vez, los kirchneristas más fieles, como Carlos Kunkel y Dante Dovena, pidieron que los disidentes dejen la bancada, aunque no tuvieron eco en la cúpula del bloque. “No pidieron que nos vayamos del Frente para la Victoria”, coincidieron voceros de los legisladores disidentes. (NA)
Pese a que la santiagueña Marta Velarde ya confirmó que conformará un monobloque, el resto de los disidentes aguardará un poco más antes de definir su salida del oficialismo. El poderío del Frente para la Victoria -hasta ahora nunca cuestionado en la Cámara Baja- se vio seriamente perjudicado por las esquirlas que dejó el conflicto del agro y el fuerte golpe que el oficialismo sufrió en el Senado. Si bien el jefe de la bancada, Agustín Rossi, logró -entre propios y aliados- que Diputados hiciera la voluntad de la Casa Rosada con el proyecto de retenciones móviles, la cuestión propició que se resquebrajaran sus filas y se perdieran por el camino a varias de sus principales figuras. Quince legisladores optaron por el no a las retenciones. A la vez, los kirchneristas más fieles, como Carlos Kunkel y Dante Dovena, pidieron que los disidentes dejen la bancada, aunque no tuvieron eco en la cúpula del bloque. “No pidieron que nos vayamos del Frente para la Victoria”, coincidieron voceros de los legisladores disidentes. (NA)