Los manifestantes desbordaron Buenos Aires

BUENOS AIRES. La ciudad apareció ayer dividida por los dos actos. Por un lado, la concentración que organizó el Partido Justicialista y sus aliados -en la Plaza del Congreso- en favor del proyecto del Gobierno nacional de implementar retenciones móviles para las exportaciones de soja y de girasol.
Y por el otro, los ruralistas y un amplio arco que incluye a la oposición política, a peronistas disidentes, con el apoyo de numerosos grupos de vecinos porteños, que rechazan la propuesta oficialista e impulsan el diseño de un plan agropecuario nacional que incluya a todas las economías regionales.
La efervescencia por los dos actos, uno a favor y otro en contra del proyecto oficial sobre retenciones móviles, provocó serios trastornos en la Ciudad de Buenos Aires, tanto cuando llegaron las columnas como cuando se desconcentraron.
El Gobierno nacional dispuso fuertes dispositivos de seguridad para evitar que los concurrentes a ambas movilizaciones se crucen en algún lugar, pese a los cinco kilómetros de distancia que separan al Congreso del Monumento de los Españoles. Hubo grandes sectores cortados al tránsito, lo que obligó a varias líneas de colectivos a desviar su recorrido, con las complicaciones que trae para muchos usuarios. A esto se sumaron vehículos particulares y taxis que intentaron llegar a destino eludiendo los sectores más difíciles. Incluso, los trenes de la línea "A" de subterráneos no se detenían en la estación Congreso, como parte de las medidas de seguridad adoptadas para el acto organizado por el kirchnerismo.
Miles de manifestantes, en forma individual o integrando columnas organizadas, marcharon desde distintos puntos del país para participar de los actos. Si bien no hubo estimaciones oficiales respecto de la concurrencia en los actos organizados en Palermo y en el Congreso, las imágenes aéreas difundidas por la televisión mostraron una cantidad mayor de asistentes al acto organizado por las entidades del campo. La Policía Federal, como en casos anteriores, se negó a informar oficialmente sobre la cantidad de asistentes. Los ruralistas informaron que reunieron a unos 225.000 en su acto, mientras que desde los sectores ligados al Gobierno no se hicieron estimaciones de la concurrencia. Sin embargo, fuentes no oficiales estimaron que asistieron alrededor de 95.000 personas. Las imágenes tomadas por helicópteros mostraron que la Plaza del Congreso estaba llena en un 80%, con muchas personas ubicadas sobre las avenidas Callao y Entre Ríos. En cambio, la gente que asistió al acto del campo se ubicó no sólo alrededor del palco, sobre la avenida Sarmiento, sino que se extendió en forma compacta sobre la Avenida del Libertador.

Repercusión mundial
Ambos actos ocuparon las ediciones de los diarios del mundo. "El País" (España) tituló: "El conflicto del campo colapsa Buenos Aires"; "El País" (Uruguay) destacó que unas 225.000 personas se reunieron en Palermo; "El Nacional" (Bolivia) escribió: "Oficialistas y agropecuarios colapsan Buenos Aires con actos antagónicos"; "El Comercio" (Perú) señaló que con estas marchas Gobierno y agro argentino midieron fuerzas. (DyN-NA-Especial)