Incertidumbre entre los que viven cerca de donde harán los actos

A una semana de la visita de los presidentes del Mercosur, y cuando resta menos aún para la llegada de las delegaciones que llevarán adelante la Cumbre Social, la incertidumbre parece ser lo único seguro para quienes viven o trabajan cerca de los lugares en donde se realizarán las reuniones.
Ayer hubo un continuo peregrinar de ciudadanos hacia el edificio de la Secretaría de Hacienda de Laprida y San Martín (ex Banco de la Provincia de Tucumán), convencidos de que en el lugar se estaban entregando las credenciales que posibilitarían la libre circulación en la zona afectada por medidas de seguridad y por cercos policiales, tal como pretendía un insistente rumor.
Apenas superado el imponente portón de acceso, que se encuentra recién pintado, en los mostradores de planta baja, una decena de empleados con terminales flamantes de computación sólo podían aclarar que nada tenían que ver con este tema. Su función estaba limitada a acreditar a quienes presten servicios o sea personal estatal afectado a la cumbre.
La respuesta decepcionaba, sin llegar a enfadar a quienes iban en busca de respuesta. Sus pasos se dirigían, preferentemente, hasta la cercana Comisaría Primera, donde tampoco tenían precisiones sobre los trámites. En todos lados, la sugerencia era que se espere hasta mañana o el jueves para tener aclarado el panorama.

Distintas inquietudes
Santiago Hernando trabaja en la Farmacia La Unión. Saber quiénes podrán superar las vallas policiales y qué nivel de actividad comercial habrá durante la cumbre es clave para ese negocio. "Hasta ahora no hay ningún dato preciso sobre los bloqueos en el radio céntrico. No sabemos qué vamos a hacer con la gente ni cómo vamos a cubrir la provisión de remedios a los hospitales", explicó en las puertas de la Secretaría de Hacienda.
Las mismas dudas tenía el abogado Héctor Zato Colom, cuyas oficinas están en San Martín al 200 y donde trabajan 10 empleados. En su caso, ni siquiera sabe todavía si van a funcionar los tribunales de 24 de Setiembre al 700 (Civil y Comercial Común y Contencioso Administrativo), aunque da por descartado que el de Cobro y Apremios (San Martín al 300) estará cerrado. En la misma cuadra de su estudio está una escuela de gastronomía, cuya dirección se debatía ayer entre suspender o no las clases en los días más complicados.
Vital es también contar con información correcta para José Miguel Vega, quien hace trámites particulares (gestiones, pago de impuestos y facturas o compras y traslados de pequeñas cosas), sin tener relación con ninguna agencia de servimoto. "El día que no trabajo, no tengo ingresos para sobrevivir. Quiero saber si voy a poder hacer algo en el centro o si mejor me quedo en casa", sostuvo.

En domicilios particulares
"No hay información sobre nada. Siempre nos entregan cualquier cantidad de folletos sobre cualquier cosa, y no entiendo por qué no lo hacen con este tema", se quejaba ayer Fernanda de Souza, quien no sabe todavía si podrá entrar a su departamento en Santiago del Estero primera cuadra cuando los presidentes estén en los hoteles frente al parque 9 de Julio. La cordobesa Macarena vive una situación similar, porque es vecina del Catalinas Park, sede del principal cónclave.
Juan González tiene su domicilio a 30 metros de la Casa de Gobierno. "Sólo quiero saber si me quedo en los días de la cumbre o si mejor me voy a otro lado. La Policía le pidió al portero del edificio que le informe quiénes vivimos allí, con los números de DNI", señaló.
Esa manera de hacer el relevamiento fue confirmada por Andrés López, cuyo departamento está en 24 de Setiembre y Maipú. "Desde la Comisaría Primera le mandaron una nota al consorcio para que le remitan un listado de los habitantes del edificio, pero no se la entregó en el tiempo ordenado. Ahora estamos esperando las novedades", concluyó.