22 Junio 2008
Buenos Aires.- Unos 50 mil trabajadores corren riesgo de ser suspendidos en los próximos días ante la falta de insumos en las fábricas, como consecuencia del conflicto agropecuario entre el Gobierno y el campo, que ya lleva más de 100 días. Las provincias más afectadas por los impactos de la protesta agropecuaria fueron Entre Ríos, Santa Fe, San Luis y Córdoba, donde las suspensiones de trabajadores, la eliminación de horas extra y la caída de la producción fueron moneda corriente de los últimos días.
En Córdoba, el titular de la Unión Industrial local, Oscar Guardianelli, confirmó que se suspendieron por lo menos 20.000 operarios.
Igual número de trabajadores tuvieron que ser licenciados en la provincia de Santa Fe, en donde el presidente de la Federación de Industriales, Carlos Capisano, ratificó que los trabajadores fueron afectados con el recorte en los turnos y el adelanto de las vacaciones.
A nivel nacional, la Unión Industrial Argentina (UIA) tuvo que admitir las consecuencias del desabastecimiento de insumos y combustibles y al reconocer que en muchas fábricas esta situación está forzando a suspender personal.
En San Luis, el titular de la Cámara de Industria local, Jorge Edgar, explicó que: "varias empresas tuvieron que suspender personal mientras no llegaban los insumos y reincorporarlos cuando algún camión lograba llegar".
El inconveniente de tener que suspender personal no es solamente la baja de la producción sino que los empresarios tienen que para el sueldo sin que los operarios trabajen.
Del otro lado, la situación es igual de grave dado que los trabajadores no sólo no trabajan sino que además perciben el 70% de su salario, con lo cual se les hace imposible enfrentar el alza de precios de los alimentos, producto de los faltantes por los cortes de rutas.
Tanto trabajadores como empresarios esperan que el levantamiento de los piquetes rurales permita llegar los insumos a las fábricas y comenzar a normalizar lentamente la situación del sector. Además, adelantaron que podrían encarar ellos mismos las protestas si el conflicto no se soluciona. (NA)
En Córdoba, el titular de la Unión Industrial local, Oscar Guardianelli, confirmó que se suspendieron por lo menos 20.000 operarios.
Igual número de trabajadores tuvieron que ser licenciados en la provincia de Santa Fe, en donde el presidente de la Federación de Industriales, Carlos Capisano, ratificó que los trabajadores fueron afectados con el recorte en los turnos y el adelanto de las vacaciones.
A nivel nacional, la Unión Industrial Argentina (UIA) tuvo que admitir las consecuencias del desabastecimiento de insumos y combustibles y al reconocer que en muchas fábricas esta situación está forzando a suspender personal.
En San Luis, el titular de la Cámara de Industria local, Jorge Edgar, explicó que: "varias empresas tuvieron que suspender personal mientras no llegaban los insumos y reincorporarlos cuando algún camión lograba llegar".
El inconveniente de tener que suspender personal no es solamente la baja de la producción sino que los empresarios tienen que para el sueldo sin que los operarios trabajen.
Del otro lado, la situación es igual de grave dado que los trabajadores no sólo no trabajan sino que además perciben el 70% de su salario, con lo cual se les hace imposible enfrentar el alza de precios de los alimentos, producto de los faltantes por los cortes de rutas.
Tanto trabajadores como empresarios esperan que el levantamiento de los piquetes rurales permita llegar los insumos a las fábricas y comenzar a normalizar lentamente la situación del sector. Además, adelantaron que podrían encarar ellos mismos las protestas si el conflicto no se soluciona. (NA)
Lo más popular
