15 Junio 2008
RECONOCIMIENTO. El técnico Carlos Roldán tuvo la virtud de canjear las críticas por los elogios generalizados. LA GACETA / FRANCO VERA
Por José Miguel Manrique - Redacción de LA GACETA.
“La clave del éxito hay buscarla en la intimidad del grupo. Estos jugadores supieron imponerse en los momentos más difíciles. No importa si jugaron bien, regular o mal. Nunca claudicaron. Fueron ellos los artífices de este gran momento que gozamos todos”, fue la reflexión de Carlos Roldán mientras en La Ciudadela se festejaba la obtención del título.
Esta vez hubo banderas a favor del técnico. Una, que fue paseada por el campo de juego, lucía una leyenda que decía: “gracias por siempre Roldán. Sin vos, este sueño no sería posible”. Pero lejos de llevarse todo el crédito, él repartió méritos con sus jugadores. “Un entrenador no puede lograr solo lo que se consiguió en esta oportunidad. El plantel se comprometió a buscar el objetivo y lo hizo con firmeza. Para eso contó con el apoyo del cuerpo técnico y de los dirigentes. Todas las partes tienen que acomodarse para conformar una sociedad. Así se consiguen los objetivos”, indicó.
Al hacer un balance de los cuatro años de trabajo, Roldán dijo estar conforme, pero aclaró: “no todo finaliza con este ascenso que conseguimos. Concluyó una etapa y hay que prepararse para empezar una nueva, que seguramente va a ser más difícil. Esperemos que el desafío que viene nos tenga otra vez como parte protagónica de la historia”.
“Ahora el desafío será conservar todo lo conseguido. Seguramente no vamos a tener inconvenientes, porque sabemos lo que es necesario hacer. Para hablar del futuro todavía tenemos un poco de tiempo. Ahora quiero disfrutar a full con mi familia este hermoso momento”, señaló el entrenador campeón. Un profesional que aceptó el reto de dirigir a San Martín en la Liga hace cuatro años y ayer vio a sus dirigidos dar la vuelta olímpica. “Mis amigos me decían que estaba loco cuando vine. Ahora quiero seguir estando loco para buscar nuevo objetivos”, expresó con una amplia sonrisa.
Germán Caffa fue uno de los jugadores que, a pleno rendimiento, primero se ganó el reconocimiento del técnico Carlos Roldán. Luego entró en el corazón del simpatizante de San Martín con actuaciones de real mérito, que le permitieron ser considerado uno de los mejores arqueros de la categoría.
El guardavallas oriundo de Concepción del Uruguay (Entre Ríos) se sintió complacido, ya que pudo concretar el segundo objetivo que se había trazado cuando dio comienzo la temporada 2007/08. Primero concretaron el ascenso y ayer obtuvieron el título de la Primera “B” Nacional.
“Por fin se terminó todo con los resultados que esperábamos. A través de toda la temporada hicimos todos los méritos como para terminar siendo el mejor equipo del torneo. Ahora lo único que nos queda es festejar como se merece algo que tanto nos costó conseguir”, señaló el Nº 1.
Como se siente una persona positiva por naturaleza, el entrerriano confiesa que cuando llegó al club siempre se tuvo fe. “Siempre fui optimista, primero pensando que iba a ganarme un lugar en el equipo y luego que colaboraría para que a esta altura del año estuviéramos celebrando por partida doble. Por suerte, Dios me ayudó a cristalizar estos objetivos”, señaló.
El arquero, uno de los jugadores más cotizados del plantel “santo”, confesó que todavía no tiene nada definido sobre su futuro. “Como la mayoría de los integrantes del grupo, no hablamos nada con los directivos. Durante la semana lo haremos”, destacó.
A la familia le hubiera gustado acompañar a Germán en un día tan especial, pero no pudimos salir de Concepción del Uruguay a causa de los cortes en las rutas. En Entre Ríos vivimos la parte más dura del conflicto con el campo.
Estamos felices y orgullosos por este logro y felicitamos a la gran familia de San Martín. En especial a Carlos Roldán, que es un gran técnico. Y también a Pablito López, que tiene grandes condiciones y siempre va para adelante.
Me gustaría que Germán se quede en San Martín para jugar en la “A”. La institución ya demostró que tiene mentalidad de Primera división; claro que ahora tendrá que romper el chanchito y formar un plantel fuerte, porque se viene un desafío importante.
Aprovecho para desearle suerte también a la gente de Atlético y a un amigo como “Capé” Sarría.
“La clave del éxito hay buscarla en la intimidad del grupo. Estos jugadores supieron imponerse en los momentos más difíciles. No importa si jugaron bien, regular o mal. Nunca claudicaron. Fueron ellos los artífices de este gran momento que gozamos todos”, fue la reflexión de Carlos Roldán mientras en La Ciudadela se festejaba la obtención del título.
Esta vez hubo banderas a favor del técnico. Una, que fue paseada por el campo de juego, lucía una leyenda que decía: “gracias por siempre Roldán. Sin vos, este sueño no sería posible”. Pero lejos de llevarse todo el crédito, él repartió méritos con sus jugadores. “Un entrenador no puede lograr solo lo que se consiguió en esta oportunidad. El plantel se comprometió a buscar el objetivo y lo hizo con firmeza. Para eso contó con el apoyo del cuerpo técnico y de los dirigentes. Todas las partes tienen que acomodarse para conformar una sociedad. Así se consiguen los objetivos”, indicó.
Al hacer un balance de los cuatro años de trabajo, Roldán dijo estar conforme, pero aclaró: “no todo finaliza con este ascenso que conseguimos. Concluyó una etapa y hay que prepararse para empezar una nueva, que seguramente va a ser más difícil. Esperemos que el desafío que viene nos tenga otra vez como parte protagónica de la historia”.
“Ahora el desafío será conservar todo lo conseguido. Seguramente no vamos a tener inconvenientes, porque sabemos lo que es necesario hacer. Para hablar del futuro todavía tenemos un poco de tiempo. Ahora quiero disfrutar a full con mi familia este hermoso momento”, señaló el entrenador campeón. Un profesional que aceptó el reto de dirigir a San Martín en la Liga hace cuatro años y ayer vio a sus dirigidos dar la vuelta olímpica. “Mis amigos me decían que estaba loco cuando vine. Ahora quiero seguir estando loco para buscar nuevo objetivos”, expresó con una amplia sonrisa.
“Sabía que iba a ganarme un lugar entre los titulares”
Germán Caffa fue uno de los jugadores que, a pleno rendimiento, primero se ganó el reconocimiento del técnico Carlos Roldán. Luego entró en el corazón del simpatizante de San Martín con actuaciones de real mérito, que le permitieron ser considerado uno de los mejores arqueros de la categoría.
El guardavallas oriundo de Concepción del Uruguay (Entre Ríos) se sintió complacido, ya que pudo concretar el segundo objetivo que se había trazado cuando dio comienzo la temporada 2007/08. Primero concretaron el ascenso y ayer obtuvieron el título de la Primera “B” Nacional.
“Por fin se terminó todo con los resultados que esperábamos. A través de toda la temporada hicimos todos los méritos como para terminar siendo el mejor equipo del torneo. Ahora lo único que nos queda es festejar como se merece algo que tanto nos costó conseguir”, señaló el Nº 1.
Como se siente una persona positiva por naturaleza, el entrerriano confiesa que cuando llegó al club siempre se tuvo fe. “Siempre fui optimista, primero pensando que iba a ganarme un lugar en el equipo y luego que colaboraría para que a esta altura del año estuviéramos celebrando por partida doble. Por suerte, Dios me ayudó a cristalizar estos objetivos”, señaló.
El arquero, uno de los jugadores más cotizados del plantel “santo”, confesó que todavía no tiene nada definido sobre su futuro. “Como la mayoría de los integrantes del grupo, no hablamos nada con los directivos. Durante la semana lo haremos”, destacó.
Punto de vista
Se lo merecen
Por Gustavo Efraín Caffa - Padre del arquero
Se lo merecen
Por Gustavo Efraín Caffa - Padre del arquero
A la familia le hubiera gustado acompañar a Germán en un día tan especial, pero no pudimos salir de Concepción del Uruguay a causa de los cortes en las rutas. En Entre Ríos vivimos la parte más dura del conflicto con el campo.
Estamos felices y orgullosos por este logro y felicitamos a la gran familia de San Martín. En especial a Carlos Roldán, que es un gran técnico. Y también a Pablito López, que tiene grandes condiciones y siempre va para adelante.
Me gustaría que Germán se quede en San Martín para jugar en la “A”. La institución ya demostró que tiene mentalidad de Primera división; claro que ahora tendrá que romper el chanchito y formar un plantel fuerte, porque se viene un desafío importante.
Aprovecho para desearle suerte también a la gente de Atlético y a un amigo como “Capé” Sarría.