14 Junio 2008
San Martín de Tucumán coronó una temporada excepcional al consagrarse hoy campeón de la Primera B Nacional, éxito que no tiene antecedentes en la vida de uno de los clubes más populares del interior del país.
Acostumbrado a compartir momentos inolvidables abrazado a la gloria, pero también a sufrir duros golpes que lo llevaron a estar hundido en profundos pozos de incertidumbre, San Martín escribió la página más importante de su historia.
El título conseguido es el premio a un equipo que mantuvo la regularidad a lo largo del torneo, ya que tomó el liderazgo en la fecha 10 y no lo abandonó nunca más, demostrando que fue el más sólido de los 20 participantes.
Sin grandes figuras, pero fiel a un esquema táctico donde el funcionamiento colectivo está por encima de las individualidades, el "Santo" tucumano justificó con creces la obtención del título.
Si bien San Martín se prepara para jugar por tercera vez en Primera división, es la primera ocasión que llega como campeón de un torneo organizado por la AFA, ya que sus anteriores logros los consiguió por la vía de torneos reducidos.
Los memoriosos recuerdan que, antes de reestructurarse las competencias nacionales en 1986, San Martín conquistó en 1944 el Campeonato de la República.
En esa competencia derrotó entre otros a Boca Juniors y a Newells, aunque las estructuras competitivas de esa época eran diferentes a las actuales.
Con una fórmula desechada por la mayoría de los clubes argentinos, la continuidad de un proceso a largo plazo y el respaldo incondicional al cuerpo técnico aún en momento complicados, San Martín alcanzó el éxito deportivo.
Carlos Roldán está al frente del plantel desde hace más de cuatro años y los dirigentes confirmaron que el entrenador seguirá una temporada más ligado a la institución y dirigirá al equipo en la máxima categoría.
El nombre del técnico apareció en la lista de candidatos de varios clubes de la B Nacional, pero en la Ciudadela reconocen los méritos del entrenador y esta tarde apareció en la cancha una bandera que decía "Gracias por siempre Roldán, sin vos este sueño no sería realidad".
Pero no sólo en el respaldo al DT se diferenció San Martín con muchos clubes argentinos donde los resultados impiden encarar trabajos a largos plazos, también encontró en el gerenciamiento del fútbol profesional una vía de escape a sus problemas.
Mientras clubes como Racing sufren con el manejo de su gerenciador y los socios imploran para que se termine el mandato de Blanquiceleste SA, en el club de La Ciudadela se puede encontrar la otra cara de la moneda.
La Gerenciadora del NOA se hizo cargo del manejo del fútbol profesional hace cinco años, en el peor momento deportivo del club, y llevó adelante un proceso que arrancó con el equipo compitiendo en la liga local y finaliza ahora con el ascenso a Primera.
El hombre fuerte de la Gerenciadora, Rubén Ale, fue elegido posteriormente presidente del club, cargo que ocupa actualmente, y delegó en su gente de confianza el manejo del fútbol profesional, lo que le permite tener el manejo futbolístico e institucional del club, ejerciendo un liderazgo por ahora indiscutido. (Télam)
Acostumbrado a compartir momentos inolvidables abrazado a la gloria, pero también a sufrir duros golpes que lo llevaron a estar hundido en profundos pozos de incertidumbre, San Martín escribió la página más importante de su historia.
El título conseguido es el premio a un equipo que mantuvo la regularidad a lo largo del torneo, ya que tomó el liderazgo en la fecha 10 y no lo abandonó nunca más, demostrando que fue el más sólido de los 20 participantes.
Sin grandes figuras, pero fiel a un esquema táctico donde el funcionamiento colectivo está por encima de las individualidades, el "Santo" tucumano justificó con creces la obtención del título.
Si bien San Martín se prepara para jugar por tercera vez en Primera división, es la primera ocasión que llega como campeón de un torneo organizado por la AFA, ya que sus anteriores logros los consiguió por la vía de torneos reducidos.
Los memoriosos recuerdan que, antes de reestructurarse las competencias nacionales en 1986, San Martín conquistó en 1944 el Campeonato de la República.
En esa competencia derrotó entre otros a Boca Juniors y a Newells, aunque las estructuras competitivas de esa época eran diferentes a las actuales.
Con una fórmula desechada por la mayoría de los clubes argentinos, la continuidad de un proceso a largo plazo y el respaldo incondicional al cuerpo técnico aún en momento complicados, San Martín alcanzó el éxito deportivo.
Carlos Roldán está al frente del plantel desde hace más de cuatro años y los dirigentes confirmaron que el entrenador seguirá una temporada más ligado a la institución y dirigirá al equipo en la máxima categoría.
El nombre del técnico apareció en la lista de candidatos de varios clubes de la B Nacional, pero en la Ciudadela reconocen los méritos del entrenador y esta tarde apareció en la cancha una bandera que decía "Gracias por siempre Roldán, sin vos este sueño no sería realidad".
Pero no sólo en el respaldo al DT se diferenció San Martín con muchos clubes argentinos donde los resultados impiden encarar trabajos a largos plazos, también encontró en el gerenciamiento del fútbol profesional una vía de escape a sus problemas.
Mientras clubes como Racing sufren con el manejo de su gerenciador y los socios imploran para que se termine el mandato de Blanquiceleste SA, en el club de La Ciudadela se puede encontrar la otra cara de la moneda.
La Gerenciadora del NOA se hizo cargo del manejo del fútbol profesional hace cinco años, en el peor momento deportivo del club, y llevó adelante un proceso que arrancó con el equipo compitiendo en la liga local y finaliza ahora con el ascenso a Primera.
El hombre fuerte de la Gerenciadora, Rubén Ale, fue elegido posteriormente presidente del club, cargo que ocupa actualmente, y delegó en su gente de confianza el manejo del fútbol profesional, lo que le permite tener el manejo futbolístico e institucional del club, ejerciendo un liderazgo por ahora indiscutido. (Télam)
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