La inflación real, una incógnita que complica toda la economía

La inflación real, una incógnita que complica toda la economía

La anomia estadística en la que cayó el país debido a la intervención del Gobierno nacional en el Indec trastorna negociaciones salariales, presentaciones contables, cálculos de rendimiento y estimaciones de pobreza e indigencia y facilita posibles acciones judiciales de bonistas que se sientan perjudicados de manera por el Estado.

LOS QUE LA SUFREN. El termómetro de la inflación es el consumidor que día tras día observa cómo las variaciones de precios afectan a su bolsillo. NA LOS QUE LA SUFREN. El termómetro de la inflación es el consumidor que día tras día observa cómo las variaciones de precios afectan a su bolsillo. NA
25 Mayo 2008
La inflación en la Argentina no sólo atenta contra la capacidad de compra de la población, lo que perjudica su calidad de vida, sino que afecta al conjunto de la economía, ya que, desacreditadas al 100% las estadísticas oficiales, no hay ningún parámetro certero a tomar.
Esta anomia estadística complica negociaciones salariales, presentaciones contables, cálculos de rendimiento, estimaciones de pobreza e indigencia (que toman como base una canasta ajustada por el Indice de Precios al Consumidor, IPC) y promueve acciones judiciales de bonistas que se sientan perjudicados por el Estado.
En las últimas semanas dos acciones del Gobierno nacional han agregado incertidumbre al ya muy polémico panorama:
• El cambio de la metodología de medición del Indice de Precios al Consumidor (IPC).
• Dejar de difundir el cálculo de la inflación en las provincias.
Ninguna de las dos medidas ha sido debidamente justificada por el Poder Ejecutivo nacional. En consecuencia, las dudas no sólo persisten, si no que se han multiplicado.
“Se trata de medidas elusivas del problema real que sólo aportan más desconfianza al sistema”, dijo Susana Nuti, directora de la Fundación Mercado. En este contexto, la pregunta que la sociedad se hace es: ¿cuál es el costo de vida en el país? ¿Y en la provincia?

Dos estimaciones
La inflación 2008 en Tucumán puede ser del 14,8% o del 23,6%. Estas cifras surgen de dos análisis: uno que deriva de los últimos datos oficiales de la inflación de la provincia y otro de estudios privados, a los que tuvo acceso LA GACETA.
La estimación del 14,8% surge del cálculo de la suba de precios al consumidor en Tucumán durante los primeros tres meses del año.
Según el Indec, el alza acumulada de precios en Tucumán entre enero y marzo fue del 3,7%. Si esa cifra se prorratea a diciembre, la inflación anual sería del 14,8%.
El segundo dato, del 23,6%, es el resultado de un cálculo de la proyección de la recaudación anual del impuesto a los Ingresos Brutos. Este gravamen provincial, como la recaudación por IVA en el ámbito nacional, posee un alto componente de precios, según consignaron distintos analistas consultados.
De todas maneras, como el Gobierno nacional decidió dejar de medir la inflación en las provincias desde el mes pasado, este año no se sabrá cuál será la inflación en Tucumán. Al respecto, consultado por LA GACETA, el gobernador, José Alperovich, dijo que por ahora en Tucumán se considerará como parámetro el IPC, que es un cálculo de la suba de precios de Capital Federal y del Gran Buenos Aires y se toma -tal vez equivocadamente- como la inflación de todo el país. Pese a la afirmación de Alperovich, el especialista Juan Carlos Abril advirtió que la Dirección de Estadística puede seguir relevando los precios en Tucumán y calcular el índice.
“Técnicamente, Tucumán está en condiciones de seguir haciéndolo. Tiene infraestructura y recursos humanos muy bien formados”, dijo el ex director de Estadística de la provincia.

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