14 Mayo 2008
La Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (Adepa) expresó su preocupación por lo que consideró ataques de sectores oficiales y paraoficiales contra la prensa en general, y diversos medios en particular, y solicitó de los poderes del Estado, el compromiso activo e irrenunciable en la investigación y sanción de sus responsables. Además, detalló los diferentes avances del poder político contra medios y periodistas, y denunció que el hostigamiento y la estigmatización se reiteran en la actitud del poder político hacia la prensa, y otros sectores de la sociedad, desplazando el diálogo y el debate como herramientas de convivencia social.
A continuación, reproducimos partes de la declaración oficial que recibió LA GACETA:
Adepa lamenta tener que denunciar su preocupación por la reiteración y el agravamiento de ataques contra la prensa.
Primero, fue la sugestiva multiplicación de proyectos y medidas orientados a incidir en la labor periodística o en la actividad de los medios, en un clima de confrontación. Luego, la campaña de afiches desplegada, con sellos afines al Gobierno y cuyo financiamiento no ha sido explicado.
Ahora, se suman nuevos motivos de alarma: la violación y la difusión de correos electrónicos privados y los ataques personales contra editores y periodistas del diario “Clarín”. La gravedad de los hechos no puede pasar desapercibida: se trata de un serio delito que, además de su mensaje de amedrentamiento, puede terminar afectando la seguridad de las personas. El año pasado también sufrieron violaciones de sus correos electrónicos periodistas y editores de Clarín, “La Nación” y de “Editorial Perfil”.
De la misma hostilidad fue víctima el periodista de “Clarín”, Julio Blanck, a raíz de una columna de opinión titulada “La construcción del relato oficialista volvió a tropezar con la dura realidad”.
La declaración concluye diciendo: “Adepa sostiene que la labor periodística no está exenta del disenso, la opinión y el debate. Pero, cuando ese intercambio se reemplaza por el ataque personal, la amenaza permanente, la no aceptación del pluralismo o el clima de temor e impunidad, se encienden luces amarillas para la vida democrática”.
A continuación, reproducimos partes de la declaración oficial que recibió LA GACETA:
Adepa lamenta tener que denunciar su preocupación por la reiteración y el agravamiento de ataques contra la prensa.
Primero, fue la sugestiva multiplicación de proyectos y medidas orientados a incidir en la labor periodística o en la actividad de los medios, en un clima de confrontación. Luego, la campaña de afiches desplegada, con sellos afines al Gobierno y cuyo financiamiento no ha sido explicado.
Ahora, se suman nuevos motivos de alarma: la violación y la difusión de correos electrónicos privados y los ataques personales contra editores y periodistas del diario “Clarín”. La gravedad de los hechos no puede pasar desapercibida: se trata de un serio delito que, además de su mensaje de amedrentamiento, puede terminar afectando la seguridad de las personas. El año pasado también sufrieron violaciones de sus correos electrónicos periodistas y editores de Clarín, “La Nación” y de “Editorial Perfil”.
De la misma hostilidad fue víctima el periodista de “Clarín”, Julio Blanck, a raíz de una columna de opinión titulada “La construcción del relato oficialista volvió a tropezar con la dura realidad”.
La declaración concluye diciendo: “Adepa sostiene que la labor periodística no está exenta del disenso, la opinión y el debate. Pero, cuando ese intercambio se reemplaza por el ataque personal, la amenaza permanente, la no aceptación del pluralismo o el clima de temor e impunidad, se encienden luces amarillas para la vida democrática”.