02 Mayo 2008
INQUIETUD GENERALIZADA. La oposición manifiesta que San Miguel de Tucumán no está en condiciones de recibir a los ilustres visitantes. LA GACETA / JOSE NUNO
Los opositores recibieron con pocas expectativas y muchos cuestionamientos el anuncio de que Tucumán será la sede de la Cumbre del Mercosur, la cual se realizará durante el 30 de junio y el 1 de julio próximos.
"Se trata, sin dudas, de un acontecimiento muy importante para Tucumán, pero para el cual la Provincia no está preparada. Nos falta, por ejemplo, el centro de convenciones tan anunciado por el Gobierno cuando permitió el desembarco de Casino Club", disparó el presidente de la UCR, Mario Marigliano.
"Espero que el resultado sea exitoso, para que la provincia logre alguna proyección turística. Pero si el Gobierno no les encarga esto a expertos, vamos a tener que rezar para que se haga el menor de los papelones", aseveró.
Resquemores y críticas
"Es importante que Tucumán comience a ser conocida en el mundo por algo más que los casos de corrupción y la desnutrición infantil", sostuvo, por su parte, el legislador Esteban Jerez (bloque Alberdi).
Sin embargo, advirtió que la realización del encuentro de presidentes hace que los propios tucumanos conozcan lo que calificó como la realidad de un desgobierno de décadas. "Al punto que no tenemos las condiciones hoteleras, aeroportuarias ni comunicacionales para afrontar este acontecimiento", condenó.
Su par de Fuerza Republicana, Ricardo Bussi, también hizo votos porque la cumbre se realice exitosamente, pero dijo que la publicidad oficial acerca de esa reunión no debe ocultar las carencias estructurales de Tucumán. "Desde que asumió, este Gobierno (por el de José Alperovich) manejó presupuestos públicos por más de $ 15.000 millones. Pero hoy deben salir a parchar habitaciones de hotel para recibir Presidentes", contrastó.
"Esta es una excelente oportunidad para que el gobernador, más allá de sus anuncios grandilocuentes, dé serias explicaciones respecto de qué hizo con el dinero de los tucumanos", reclamó.
El laborista Osvaldo Cirnigliaro, a su turno, expresó que la elección de Tucumán como sede es un gesto de la Nación que intenta recuperar políticamente a un mandatario que fue fiel durante el conflicto con el campo.
"Todos debemos colaborar para que esto salga bien, porque cuando hay visitas no se debe mostrar la ropa sucia. El problema de Alperovich y su gabinete es que el territorio provincial ya resulta chico para guardar tanta inmundicia, derivada del accionar de la corporación mafiosa que gobierna Tucumán. Así que será una tarea difícil para los ilustres visitantes sentirse cómodos ante una población hambrienta y desocupada, en una ciudad colapsada", sentenció.
Desde el Partido Socialista, Rodolfo Succar aseguró que, teniendo en cuenta las características del hecho y el comportamiento de la Nación, el protagonismo para los referentes provinciales durante el encuentro será escaso.
"Siempre es bueno que Tucumán pueda ser escenario de una reunión de Presidentes. Pero eso no cambia, por arte de magia, los severos problemas de fondo de la provincia, que se hacen patentes en la carencia de infraestructura para afrontar este desafío internacional. Ojalá que, cuanto menos, la Municipalidad se esfuerce para que podamos mostrar un aspecto varias veces mejor que el que la capital muestra actualmente", puntualizó.
Manifestación en puerta
"Hasta aquí, lo único que se ve es que el Gobierno aprovechará la cumbre para hacer nuevos negocios y negociados, por ejemplo, con los hoteles. Y, de paso, van a fortalecer el aparato represivo con la excusa de que deben reforzar la seguridad. Ya vimos una muestra de ello (en mayo de 2007), con el encuentro de gobernadores argentinos y brasileños, cuando todo el centro fue sitiado", manifestó Daniel Blanco.
El titular del Partido Obrero también advirtió que el cónclave de jefes de Estado se realizará en un contexto complejo. "La estatización de la metalúrgica Sidor, en Venezuela, ¿se hará a expensas de los trabajadores o van a satisfacer sus demandas? El referendo que tolera el Gobierno de Bolivia, ¿terminará protegiendo los intereses de la oligarquía por el dominio de la tierra? En la Argentina, ¿a dónde nos llevará el arreglo con los grandes grupos agropecuarios y el proceso inflacionario? Vamos a convocar a organizaciones sociales y fuerzas políticas para manifestarnos durante la cumbre en favor de los perentorios reclamos continentales para sacar de la opresión a millones de personas", anticipó.
"Se trata, sin dudas, de un acontecimiento muy importante para Tucumán, pero para el cual la Provincia no está preparada. Nos falta, por ejemplo, el centro de convenciones tan anunciado por el Gobierno cuando permitió el desembarco de Casino Club", disparó el presidente de la UCR, Mario Marigliano.
"Espero que el resultado sea exitoso, para que la provincia logre alguna proyección turística. Pero si el Gobierno no les encarga esto a expertos, vamos a tener que rezar para que se haga el menor de los papelones", aseveró.
Resquemores y críticas
"Es importante que Tucumán comience a ser conocida en el mundo por algo más que los casos de corrupción y la desnutrición infantil", sostuvo, por su parte, el legislador Esteban Jerez (bloque Alberdi).
Sin embargo, advirtió que la realización del encuentro de presidentes hace que los propios tucumanos conozcan lo que calificó como la realidad de un desgobierno de décadas. "Al punto que no tenemos las condiciones hoteleras, aeroportuarias ni comunicacionales para afrontar este acontecimiento", condenó.
Su par de Fuerza Republicana, Ricardo Bussi, también hizo votos porque la cumbre se realice exitosamente, pero dijo que la publicidad oficial acerca de esa reunión no debe ocultar las carencias estructurales de Tucumán. "Desde que asumió, este Gobierno (por el de José Alperovich) manejó presupuestos públicos por más de $ 15.000 millones. Pero hoy deben salir a parchar habitaciones de hotel para recibir Presidentes", contrastó.
"Esta es una excelente oportunidad para que el gobernador, más allá de sus anuncios grandilocuentes, dé serias explicaciones respecto de qué hizo con el dinero de los tucumanos", reclamó.
El laborista Osvaldo Cirnigliaro, a su turno, expresó que la elección de Tucumán como sede es un gesto de la Nación que intenta recuperar políticamente a un mandatario que fue fiel durante el conflicto con el campo.
"Todos debemos colaborar para que esto salga bien, porque cuando hay visitas no se debe mostrar la ropa sucia. El problema de Alperovich y su gabinete es que el territorio provincial ya resulta chico para guardar tanta inmundicia, derivada del accionar de la corporación mafiosa que gobierna Tucumán. Así que será una tarea difícil para los ilustres visitantes sentirse cómodos ante una población hambrienta y desocupada, en una ciudad colapsada", sentenció.
Desde el Partido Socialista, Rodolfo Succar aseguró que, teniendo en cuenta las características del hecho y el comportamiento de la Nación, el protagonismo para los referentes provinciales durante el encuentro será escaso.
"Siempre es bueno que Tucumán pueda ser escenario de una reunión de Presidentes. Pero eso no cambia, por arte de magia, los severos problemas de fondo de la provincia, que se hacen patentes en la carencia de infraestructura para afrontar este desafío internacional. Ojalá que, cuanto menos, la Municipalidad se esfuerce para que podamos mostrar un aspecto varias veces mejor que el que la capital muestra actualmente", puntualizó.
Manifestación en puerta
"Hasta aquí, lo único que se ve es que el Gobierno aprovechará la cumbre para hacer nuevos negocios y negociados, por ejemplo, con los hoteles. Y, de paso, van a fortalecer el aparato represivo con la excusa de que deben reforzar la seguridad. Ya vimos una muestra de ello (en mayo de 2007), con el encuentro de gobernadores argentinos y brasileños, cuando todo el centro fue sitiado", manifestó Daniel Blanco.
El titular del Partido Obrero también advirtió que el cónclave de jefes de Estado se realizará en un contexto complejo. "La estatización de la metalúrgica Sidor, en Venezuela, ¿se hará a expensas de los trabajadores o van a satisfacer sus demandas? El referendo que tolera el Gobierno de Bolivia, ¿terminará protegiendo los intereses de la oligarquía por el dominio de la tierra? En la Argentina, ¿a dónde nos llevará el arreglo con los grandes grupos agropecuarios y el proceso inflacionario? Vamos a convocar a organizaciones sociales y fuerzas políticas para manifestarnos durante la cumbre en favor de los perentorios reclamos continentales para sacar de la opresión a millones de personas", anticipó.
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