Luchan contra plagas y enfermedades

La biotecnología es una herramienta estratégica para los sectores agropecuario y agroindustrial. Es mucho más que un producto transgénico, es sinónimo de genética y, precisamente, en la diversidad genética hay un mundo para descubrir en lo que hace al agregado de valor en la cadena de la soja, sostuvo en su disertación Esteban Hopp, coordinador del área estratégica de biología molecular, bioinformática y genética de avanzada del INTA. Estamos trabajando en la búsqueda de resistencia a plagas y enfermedades; lo más reciente es la búsqueda de genes para poder luchar contra el sorgo de alepo resistente al glifosato, comentó.
Recientemente se detectaron cepas de “sorgo de alepo resistente al glifosato” en el norte del país. Las resistencias verificadas fueron diferentes en los sorgos de Tucumán respecto a los de Salta. “Gracias a la biotecnología estamos trabajando para buscar soluciones para el productor y poder eliminar estos genes de resistencia que  mutaron y no son afectados por el glifosato”, dijo.
A través de la biotecnología estamos estudiando todos los genes de la soja y trabajamos con diferentes líneas de investigación en cadena con todos los centros de investigación pública del Cono Sur, destacó el experto. Otro de nuestros objetivos es crear resistencia genética a la soja contra la “roya asiática” y  otros patógenos. Con la Eeaoc de Tucumán trabajan en forma conjunta en la lucha contra plagas, enfermedades y resistencias a estrés a través de la biotecnología.