05 Diciembre 2007
MANO EN ALTO. Rocchia Ferro, junto a su esposa Catalina Lonac, realizó la oferta que se impuso en el remate del ingenio Cruz Alta. LA GACETA/ JUAN PABLO SANCHEZ NOLI
Minutos antes de las 10, ayer, un camión de la empresa transportadora caudales Transplata se ubicó justo enfrente del Colegio de Martilleros, en 9 de Julio 421, de nuestra capital, aunque en esa cuadra no hay bancos. Ese detalle dio el primer indicio de que el remate del ingenio Cruz Alta podía concretarse. Y así ocurrió, porque la compañía azucarera Los Balcanes -del empresario multirrubro Jorge Rocchia Ferro- resultó adjudicataria del predio de 19 hectáreas donde está emplazada la fábrica azucarera, y deberá pagar en tres días un total de $ 10,155 millones.
La subasta comenzó pasadas las 10 de ayer -a sala colmada-, a cargo de la martillera Silvia Graciela Monteagudo. Pero no hubo oferentes en el primer llamado, que establecía una base de $ 13,5 millones. En la segunda convocatoria la base se había reducido un 25%, hasta los $ 10,1 millones -como lo establecía el llamado a remate- valor que fue cubierto por un oferente, de la empresa Konavle (también de propiedad de Rocchia Ferro). Sin embargo, de inmediato el propio Rocchia Ferro -esta vez en representación de Los Balcanes- subió levemente la apuesta y se quedó con el inmueble, porque no había ningún otro oferente. La competencia entre sí de las empresas de Rocchia Ferro no es un dato novedoso, ya que esta metodología se empleó este mismo año, cuando el empresario adquirió mediante subasta pública las tierras fiscales de Overa Pozo.
El remate de ayer fue ordenado por el juez en lo Civil y Comercial Común de la VI Nominación, Ricardo Molina, que entiende en la quiebra del Cruz Alta, que fue decretada en noviembre de 2005 luego de que fracasó el acuerdo homologado al que habían llegado la empresa fallida (Cruz Alta SA) y sus acreedores. Además del inmueble, ayer se subastaron los edificios, maquinarias, instalaciones, construcciones, muebles y útiles. De las 19 hectáreas, 14 están sembradas con caña de azúcar y en otras cuatro hectáreas se encuentra el casco del ingenio, donde está construida y funciona la planta fabril.
"Estamos apostando constantemente a Tucumán; creemos que la provincia se lo merece", dijo Rocchia Ferro a la prensa, apenas se conoció que era el adjudicatario del ingenio Cruz Alta. Hizo hincapié en que la planta "se encuentra en situación de gran descuido" y que tiene muchas cosas para arreglar.
"Obviamente, hay que invertir para que sea un ingenio más eficiente, para transformar las 31.000 toneladas que produjo este año en mucho más que eso. Lo vamos a acondicionar para que elabore azúcar, que es lo primero", remarcó el empresario.
Rocchia Ferro remarcó que su grupo inversor no conoce el estado real del ingenio. "Hay situaciones pendientes que desconocemos, que no sabemos cómo son. A medida que se vayan resolviendo esas situaciones, veremos qué es lo que hacemos", remarcó.
- ¿Usted representa a alguien o compra por su propio nombre?
- Soy un mero administrador de los bienes del Señor, que diariamente me da la posibilidad de vivir 86.000 segundos. No represento absolutamente a nadie.
- ¿Los planes apuntan a expandir la escala del ingenio?
- Obviamente, el número de 31.000 toneladas es muy chico; tenemos una serie importante de elementos y maquinarias. La Florida ha ido creciendo y hay muchos elementos de ese ingenio que vamos a usar en Cruz Alta.
- ¿Van a instalar una destilería?
- No lo sabemos. Lo importante es que el ingenio muela y que empiece a producir primero azúcar en forma eficiente.
- Además del pago del ingenio, ¿tiene establecido el monto de inversión que habrá que ejecutar en la planta?
- No, todavía hay muchas cosas que no conocemos. No tenemos noción exacta, pero sabemos que la inversión deberá ser muy importante.
La subasta comenzó pasadas las 10 de ayer -a sala colmada-, a cargo de la martillera Silvia Graciela Monteagudo. Pero no hubo oferentes en el primer llamado, que establecía una base de $ 13,5 millones. En la segunda convocatoria la base se había reducido un 25%, hasta los $ 10,1 millones -como lo establecía el llamado a remate- valor que fue cubierto por un oferente, de la empresa Konavle (también de propiedad de Rocchia Ferro). Sin embargo, de inmediato el propio Rocchia Ferro -esta vez en representación de Los Balcanes- subió levemente la apuesta y se quedó con el inmueble, porque no había ningún otro oferente. La competencia entre sí de las empresas de Rocchia Ferro no es un dato novedoso, ya que esta metodología se empleó este mismo año, cuando el empresario adquirió mediante subasta pública las tierras fiscales de Overa Pozo.
El remate de ayer fue ordenado por el juez en lo Civil y Comercial Común de la VI Nominación, Ricardo Molina, que entiende en la quiebra del Cruz Alta, que fue decretada en noviembre de 2005 luego de que fracasó el acuerdo homologado al que habían llegado la empresa fallida (Cruz Alta SA) y sus acreedores. Además del inmueble, ayer se subastaron los edificios, maquinarias, instalaciones, construcciones, muebles y útiles. De las 19 hectáreas, 14 están sembradas con caña de azúcar y en otras cuatro hectáreas se encuentra el casco del ingenio, donde está construida y funciona la planta fabril.
"Estamos apostando constantemente a Tucumán; creemos que la provincia se lo merece", dijo Rocchia Ferro a la prensa, apenas se conoció que era el adjudicatario del ingenio Cruz Alta. Hizo hincapié en que la planta "se encuentra en situación de gran descuido" y que tiene muchas cosas para arreglar.
"Obviamente, hay que invertir para que sea un ingenio más eficiente, para transformar las 31.000 toneladas que produjo este año en mucho más que eso. Lo vamos a acondicionar para que elabore azúcar, que es lo primero", remarcó el empresario.
Rocchia Ferro remarcó que su grupo inversor no conoce el estado real del ingenio. "Hay situaciones pendientes que desconocemos, que no sabemos cómo son. A medida que se vayan resolviendo esas situaciones, veremos qué es lo que hacemos", remarcó.
- ¿Usted representa a alguien o compra por su propio nombre?
- Soy un mero administrador de los bienes del Señor, que diariamente me da la posibilidad de vivir 86.000 segundos. No represento absolutamente a nadie.
- ¿Los planes apuntan a expandir la escala del ingenio?
- Obviamente, el número de 31.000 toneladas es muy chico; tenemos una serie importante de elementos y maquinarias. La Florida ha ido creciendo y hay muchos elementos de ese ingenio que vamos a usar en Cruz Alta.
- ¿Van a instalar una destilería?
- No lo sabemos. Lo importante es que el ingenio muela y que empiece a producir primero azúcar en forma eficiente.
- Además del pago del ingenio, ¿tiene establecido el monto de inversión que habrá que ejecutar en la planta?
- No, todavía hay muchas cosas que no conocemos. No tenemos noción exacta, pero sabemos que la inversión deberá ser muy importante.