30 Octubre 2007
El kirchnerismo tendrá quórum propio en el Congreso
Cristina Fernández llegará al poder con un importante respaldo legislativo, que le asegura tranquilidad a la hora de aprobar los proyectos de ley. En Diputados, el FPV tendrá 16 legisladores más de los necesarios para debatir (129), y en el Senado casi llega a los 2/3.
Buenos Aires.- La Presidenta electa de los argentinos, Cristina Fernández de Kirchner, asumirá el 10 diciembre con el quórum asegurado en ambas cámaras del Congreso y con 19 de los 24 gobernadores afines al kirchnerismo.
En la Cámara de Diputados, el kirchnerismo tendrá un interbloque que llegará a los 148 legisladores, que le asegura tranquilidad política a la hora de aprobar los proyectos. El quórum obligatorio es de 129 diputados.
El segundo dato de la realidad en la Cámara baja es que el futuro interbloque de la Coalición Cívica-Partido Socialista alcanzará los 35 diputados, desalojando de la primera mínoría a la Unión Cívica Radical (UCR), algo que nunca había ocurrido desde la recuperación democrática, en 1983.
El radicalismo reducirá de 36 a 30 los legisladores que representarán al centenario partido de la boina blanca, que lo convertirán, a partir de diciembre, en la segunda minoría de la cámara.
En tanto, en el Senado, de las 72 bancas que tiene la cámara, 47 pertenecen al Frente para la Victoria (FPV), ocho por encima del quórum propio. Así, el kirchnerismo está al borde de obtener los dos tercios de las bancas, ya que con el resultado de las elecciones el bloque oficialista mantendrá los 42 legisladores que tenía y sumará otros cinco de sus aliados de partidos provinciales o de radicales K.
El amplio triunfo logrado por Cristina Fernández en los comicios presidenciales le permitió al Frente para la Victoria obtener legisladores en siete de las ocho provincias en las que se renovaban senadores. En Salta, por ejemplo, merced a las denominadas listas colectoras, el kirchnerismo logró sumar tanto los dos senadores para la mayoría como el tercero para la primera minoría. Con ese resultado, el FPV logró conservar las 13 bancas que puso en juego.
El oficialismo sumó dos senadores en Chaco, en Neuquén, en Entre Ríos y en Río Negro, obtuvo el de la minoría en la Ciudad de Buenos Aires y en Santiago del Estero; y los tres en la provincia de Salta, ya que las dos listas mayoritarias llevaban la boleta de Cristina. Pero además, el oficialismo podrá contar con los votos que le aportarán sus cinco aliados en el Senado.
Esto elevará el número de legisladores afines al Gobierno nacional a 47, a sólo uno de los dos tercios necesarios para tratar proyectos especiales como reformas a la Ley de Coparticipación; juicios políticos; la insistencia en la sanción original de temas que regresan de Diputados y el tratamiento de proyectos sobre tablas.
La contracara en el Senado es la UCR. Puso en juego ocho de las 15 bancas que mantenía desde 2005, y sólo logró retener dos: una en el Chaco y otra en Entre Ríos.
La novedad del reparto de votos en la elección el domingo es la inminente conformación del bloque de la Coalición Cívica con cinco legisladores. El triunfo de los candidatos a senadores de Elisa Carrió en la Ciudad de Buenos Aires y en Tierra del Fuego sumará cuatro nombres al del socialista santafesino, Rubén Giustiniani.
Los justicialistas disidentes, entre los que se cuentan Hilda "Chiche" de Duhalde; Carlos Menem; Liliana Negre de Alonso; Adolfo Rodríguez Saá y Roberto Basualdo, continuarán en la Cámara, ya que ninguna de esas bancas fue puesta en juego.
Asimismo, el bloque de representantes de partidos provinciales perdió dos bancas luego de que el Partido Renovador Salteño decidió aliarse al oficialismo nacional y de que el Movimiento Popular Neuquino fue derrotado en su provincia a manos del FPV, y sólo logró el senador por la minoría.
A partir de diciembre, los partidos provinciales estarán representados por dos legisladores del Frente Cívico y Social de Catamarca y dos de Fuerza Republicana, y por uno del Partido Nuevo de Córdoba y otro del MPN.
Por otra parte, el oficialismo ganó las ocho gobernaciones que disputó, con lo cual el kirchnerismo se quedó con la administración de 19 Estados, en tanto que la oposición hará lo propio con los 5 restantes.
El kirchnerismo gobernará en 16 de las 19 provincias y las tres restantes quedarán en manos de los radicales K (Catamarca, Santiago del Estero y Corrientes). También administrará las cinco provincias norteñas del país, como son Jujuy, Salta, Tucumán, Formosa y el Chaco. (DyN-Télam)
En la Cámara de Diputados, el kirchnerismo tendrá un interbloque que llegará a los 148 legisladores, que le asegura tranquilidad política a la hora de aprobar los proyectos. El quórum obligatorio es de 129 diputados.
El segundo dato de la realidad en la Cámara baja es que el futuro interbloque de la Coalición Cívica-Partido Socialista alcanzará los 35 diputados, desalojando de la primera mínoría a la Unión Cívica Radical (UCR), algo que nunca había ocurrido desde la recuperación democrática, en 1983.
El radicalismo reducirá de 36 a 30 los legisladores que representarán al centenario partido de la boina blanca, que lo convertirán, a partir de diciembre, en la segunda minoría de la cámara.
En tanto, en el Senado, de las 72 bancas que tiene la cámara, 47 pertenecen al Frente para la Victoria (FPV), ocho por encima del quórum propio. Así, el kirchnerismo está al borde de obtener los dos tercios de las bancas, ya que con el resultado de las elecciones el bloque oficialista mantendrá los 42 legisladores que tenía y sumará otros cinco de sus aliados de partidos provinciales o de radicales K.
El amplio triunfo logrado por Cristina Fernández en los comicios presidenciales le permitió al Frente para la Victoria obtener legisladores en siete de las ocho provincias en las que se renovaban senadores. En Salta, por ejemplo, merced a las denominadas listas colectoras, el kirchnerismo logró sumar tanto los dos senadores para la mayoría como el tercero para la primera minoría. Con ese resultado, el FPV logró conservar las 13 bancas que puso en juego.
El oficialismo sumó dos senadores en Chaco, en Neuquén, en Entre Ríos y en Río Negro, obtuvo el de la minoría en la Ciudad de Buenos Aires y en Santiago del Estero; y los tres en la provincia de Salta, ya que las dos listas mayoritarias llevaban la boleta de Cristina. Pero además, el oficialismo podrá contar con los votos que le aportarán sus cinco aliados en el Senado.
Esto elevará el número de legisladores afines al Gobierno nacional a 47, a sólo uno de los dos tercios necesarios para tratar proyectos especiales como reformas a la Ley de Coparticipación; juicios políticos; la insistencia en la sanción original de temas que regresan de Diputados y el tratamiento de proyectos sobre tablas.
La contracara en el Senado es la UCR. Puso en juego ocho de las 15 bancas que mantenía desde 2005, y sólo logró retener dos: una en el Chaco y otra en Entre Ríos.
La novedad del reparto de votos en la elección el domingo es la inminente conformación del bloque de la Coalición Cívica con cinco legisladores. El triunfo de los candidatos a senadores de Elisa Carrió en la Ciudad de Buenos Aires y en Tierra del Fuego sumará cuatro nombres al del socialista santafesino, Rubén Giustiniani.
Los justicialistas disidentes, entre los que se cuentan Hilda "Chiche" de Duhalde; Carlos Menem; Liliana Negre de Alonso; Adolfo Rodríguez Saá y Roberto Basualdo, continuarán en la Cámara, ya que ninguna de esas bancas fue puesta en juego.
Asimismo, el bloque de representantes de partidos provinciales perdió dos bancas luego de que el Partido Renovador Salteño decidió aliarse al oficialismo nacional y de que el Movimiento Popular Neuquino fue derrotado en su provincia a manos del FPV, y sólo logró el senador por la minoría.
A partir de diciembre, los partidos provinciales estarán representados por dos legisladores del Frente Cívico y Social de Catamarca y dos de Fuerza Republicana, y por uno del Partido Nuevo de Córdoba y otro del MPN.
Por otra parte, el oficialismo ganó las ocho gobernaciones que disputó, con lo cual el kirchnerismo se quedó con la administración de 19 Estados, en tanto que la oposición hará lo propio con los 5 restantes.
El kirchnerismo gobernará en 16 de las 19 provincias y las tres restantes quedarán en manos de los radicales K (Catamarca, Santiago del Estero y Corrientes). También administrará las cinco provincias norteñas del país, como son Jujuy, Salta, Tucumán, Formosa y el Chaco. (DyN-Télam)
NOTICIAS RELACIONADAS
Lo más popular