17 Octubre 2007
"Con la contaminación que hay en el campo, tenemos que refugiarnos en un bar de la ciudad", reza el chiste de Calliera con el que un grupo de la Facultad de Medicina de la UNT presentó un estudio que muestra la relación más que probable entre la polución causada por la quema de cañaverales y los "efectos no deseados de la zafra", y las enfermedades pulmonares.
El trabajo fue presentado en el marco del Congreso de Medicina Respiratoria que se realizó en Tucumán. Gira alrededor de dos ejes: los resultados de una medición de partículas en el aire, en distintas localidades tucumanas, que desarrolló la Universidad Nacional de Córdoba y una encuesta realizada por pasantes de Medicina sobre habitantes de Lastenia y de Yerba Buena.
La profesora de Neumonología Nora Vázquez de Argiró, integrante del equipo, explicó que se eligieron esas localidades porque una de ellas -Lastenia- es zona de ingenios, mientras que Yerba Buena no lo es. Según patrones internacionales de calidad ambiental, los índices saludables de partículas en el aire son de 0 a 50, los moderados miden del 51 al 100; el aire malsano para grupos sensibles mide entre 101 y 150, y el aire malsano mide entre 151 y 200.
La medición de particulado suspendido total para Lastenia y para Yerba Buena, fuera de época de zafra, fue de 74 en el primer caso, y de 71 para el segundo. Cuando la medición se hizo en tiempo de zafra, el nivel de Yerba Buena permaneció inalterado, en tanto que el de Lastenia trepó a 410: más del doble de lo que los patrones internacionales califican de aire malsano.
Los resultados de la medición fueron corroborados por una encuesta a 200 personas del mismo sexo y características (100 de Lastenia y 100 de Yerba Buena) que realizaron alumnos de Medicina.
"Encontramos diferencias significativas entre una población y otra: la gente de Lastenia consulta al especialista mucho más que la de Yerba Buena; también realiza más consultas de urgencia; tiene más tos, más flema y más silbidos en el pecho. Elegimos dos grupos más o menos comparables, y sin embargo las respuestas no han sido las mismas. Pensamos que hay una relación entre polución y enfermedades respiratorias", afirmó la doctora Vázquez.
El trabajo fue presentado en el marco del Congreso de Medicina Respiratoria que se realizó en Tucumán. Gira alrededor de dos ejes: los resultados de una medición de partículas en el aire, en distintas localidades tucumanas, que desarrolló la Universidad Nacional de Córdoba y una encuesta realizada por pasantes de Medicina sobre habitantes de Lastenia y de Yerba Buena.
La profesora de Neumonología Nora Vázquez de Argiró, integrante del equipo, explicó que se eligieron esas localidades porque una de ellas -Lastenia- es zona de ingenios, mientras que Yerba Buena no lo es. Según patrones internacionales de calidad ambiental, los índices saludables de partículas en el aire son de 0 a 50, los moderados miden del 51 al 100; el aire malsano para grupos sensibles mide entre 101 y 150, y el aire malsano mide entre 151 y 200.
La medición de particulado suspendido total para Lastenia y para Yerba Buena, fuera de época de zafra, fue de 74 en el primer caso, y de 71 para el segundo. Cuando la medición se hizo en tiempo de zafra, el nivel de Yerba Buena permaneció inalterado, en tanto que el de Lastenia trepó a 410: más del doble de lo que los patrones internacionales califican de aire malsano.
Los resultados de la medición fueron corroborados por una encuesta a 200 personas del mismo sexo y características (100 de Lastenia y 100 de Yerba Buena) que realizaron alumnos de Medicina.
"Encontramos diferencias significativas entre una población y otra: la gente de Lastenia consulta al especialista mucho más que la de Yerba Buena; también realiza más consultas de urgencia; tiene más tos, más flema y más silbidos en el pecho. Elegimos dos grupos más o menos comparables, y sin embargo las respuestas no han sido las mismas. Pensamos que hay una relación entre polución y enfermedades respiratorias", afirmó la doctora Vázquez.
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