29 Agosto 2007
BUENOS AIRES.- La candidata presidencial por la Coalición Cívica, Elisa Carrió, dijo que no le tiene miedo a los procesos judiciales que deberá afrontar, entre ellos, la querella por calumnias e injurias que inició en su contra el ministro del Interior, Aníbal Fernández. “Ya he ganado más de 14 juicios”, señaló.
Carrió acusó a Fernández de presionar a la viuda de un empresario asesinado, lo que motivó la querella en su contra, pero el ministro aseguró que si la fundadora del ARI se retracta, no tendría inconveniente en levantar la denuncia. “Hice la presentación judicial porque no me puedo comer que esta mujer (la viuda del asesinado empresario Raúl Espinosa) estaba siendo presionada y no hablaba, y yo termino siendo su apretador”, indicó el ministro del Interior.
Tras ser absuelta en la causa que le entabló el empresario pesquero Héctor Antonio, Carrió volvió a justificar sus lágrimas cuando conoció la resolución y reiteró: “sentí que Dios estaba ahí, que me había acompañado y que no me había abandonado”. El jefe del Gobierno porteño, Jorge Telerman, celebró la absolución de la candidata presidencial en el juicio y sostuvo que “habría sido una mancha a la democracia” una eventual condena a Carrió. También destacó el fallo la titular del PAMI, Graciela Ocaña, al subrayar: “los argentinos estamos esperando que la Justicia funcione”. Carrió se refirió a los próximos procesos que deberá afrontar y recordó: “me han querellado Menem, Cavallo, Duhalde, tantos... que, bueno, serán otros juicios y, en todo caso, ya he ganado más de 14”. Además, estimó que por haber sido absuelta en este juicio por calumnias, queda sin efecto el proceso que le iniciaron los accionistas de Conarpesa, la empresa que ella señaló como beneficiaria de un crimen impune. “Creo que el juicio restante se cae porque es el de Juan y Fernando Castellano, que están aún más implicados en la cuestión”, enfatizó Carrió.
“Me pareció -agregó- que era importante, en la Argentina de la impunidad, que alguien que dice la verdad se siente finalmente en el banquillo de los acusados porque los otros nunca se sentaron”. (DyN)
Carrió acusó a Fernández de presionar a la viuda de un empresario asesinado, lo que motivó la querella en su contra, pero el ministro aseguró que si la fundadora del ARI se retracta, no tendría inconveniente en levantar la denuncia. “Hice la presentación judicial porque no me puedo comer que esta mujer (la viuda del asesinado empresario Raúl Espinosa) estaba siendo presionada y no hablaba, y yo termino siendo su apretador”, indicó el ministro del Interior.
Tras ser absuelta en la causa que le entabló el empresario pesquero Héctor Antonio, Carrió volvió a justificar sus lágrimas cuando conoció la resolución y reiteró: “sentí que Dios estaba ahí, que me había acompañado y que no me había abandonado”. El jefe del Gobierno porteño, Jorge Telerman, celebró la absolución de la candidata presidencial en el juicio y sostuvo que “habría sido una mancha a la democracia” una eventual condena a Carrió. También destacó el fallo la titular del PAMI, Graciela Ocaña, al subrayar: “los argentinos estamos esperando que la Justicia funcione”. Carrió se refirió a los próximos procesos que deberá afrontar y recordó: “me han querellado Menem, Cavallo, Duhalde, tantos... que, bueno, serán otros juicios y, en todo caso, ya he ganado más de 14”. Además, estimó que por haber sido absuelta en este juicio por calumnias, queda sin efecto el proceso que le iniciaron los accionistas de Conarpesa, la empresa que ella señaló como beneficiaria de un crimen impune. “Creo que el juicio restante se cae porque es el de Juan y Fernando Castellano, que están aún más implicados en la cuestión”, enfatizó Carrió.
“Me pareció -agregó- que era importante, en la Argentina de la impunidad, que alguien que dice la verdad se siente finalmente en el banquillo de los acusados porque los otros nunca se sentaron”. (DyN)
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