15 Agosto 2007
“ESTO NO ES UNA PIPA”. La reflexiva pintura del artista belga fue realizada entre 1928 y 1929.
Las imágenes plasmadas en sus pinturas están presentes en todos los tratados sobre el arte moderno. Figura fundamental dentro del surrealismo, René Magritte logró un estilo que hace inconfundibles sus obras. La teoría de Magritte propone cambiar la relación que existe entre los elementos que representa y su nombre. Por este motivo altera sus tamaños y sus perspectivas, y realiza las combinaciones más complejas entre el lenguaje y la naturaleza de los objetos.
Magritte nació en 1898 en Lessines, una pequeña localidad belga, pero su familia fijó residencia en distintos lugares en el transcurso de su infancia. Era hijo de un sastre y de una ex modista que se suicidó cuando René aún no había cumplido los 15 años.
Comenzó sus estudios artísticos en 1916, en la Academia de Bellas Artes de Bruselas. Los impresionistas ejercieron una potente influencia en su formación, pero sin duda la obra de los futuristas italianos, en especial la de Giorgio de Chirico, fue decisiva en su carrera. En los años 20 tomó contacto con otros artistas con los que formó el núcleo surrealista belga.
En 1922 se casó con Georgette Berger, de la que nunca se separó.
A mediados de la década del ’20 Magritte rompió con los cánones de la pintura tradicional y comenzó su búsqueda de efectos poéticos en las relaciones entre los objetos, que representaba según su fría apariencia.
Sobre el final de la década tomó contacto en París con Max Ernst, Jean Arp, Joan Miró y Salvador Dalí, con los que se presentó en la Exposición Surrealista de 1928.
Es difícil distinguir o señalar etapas dentro de la producción de Magritte, ya que expresa en todo momento su concepción artística con una notable coherencia. Cerca del final de la década del ’30 se realizó su primera exposición en Nueva York y participó a partir de entonces en muestras surrealistas internacionales.
En la década del ’50 concretó pinturas murales y decorativas. Después de la realización de la retrospectiva del Palacio de Bellas Artes de Bruselas se consagró como el pintor moderno más importante de Bélgica. Cerca del final de la década rodó algunos cortometrajes con su esposa y con sus amigos. Continuó participando en exposiciones internacionales, entre las que se destaca la que tuvo lugar en el Museo de Arte Moderno de Nueva York. El 15 de agosto de 1967, hace exactamente 40 años, el artista falleció en Bruselas.
Magritte nació en 1898 en Lessines, una pequeña localidad belga, pero su familia fijó residencia en distintos lugares en el transcurso de su infancia. Era hijo de un sastre y de una ex modista que se suicidó cuando René aún no había cumplido los 15 años.
Comenzó sus estudios artísticos en 1916, en la Academia de Bellas Artes de Bruselas. Los impresionistas ejercieron una potente influencia en su formación, pero sin duda la obra de los futuristas italianos, en especial la de Giorgio de Chirico, fue decisiva en su carrera. En los años 20 tomó contacto con otros artistas con los que formó el núcleo surrealista belga.
En 1922 se casó con Georgette Berger, de la que nunca se separó.
A mediados de la década del ’20 Magritte rompió con los cánones de la pintura tradicional y comenzó su búsqueda de efectos poéticos en las relaciones entre los objetos, que representaba según su fría apariencia.
Sobre el final de la década tomó contacto en París con Max Ernst, Jean Arp, Joan Miró y Salvador Dalí, con los que se presentó en la Exposición Surrealista de 1928.
Es difícil distinguir o señalar etapas dentro de la producción de Magritte, ya que expresa en todo momento su concepción artística con una notable coherencia. Cerca del final de la década del ’30 se realizó su primera exposición en Nueva York y participó a partir de entonces en muestras surrealistas internacionales.
En la década del ’50 concretó pinturas murales y decorativas. Después de la realización de la retrospectiva del Palacio de Bellas Artes de Bruselas se consagró como el pintor moderno más importante de Bélgica. Cerca del final de la década rodó algunos cortometrajes con su esposa y con sus amigos. Continuó participando en exposiciones internacionales, entre las que se destaca la que tuvo lugar en el Museo de Arte Moderno de Nueva York. El 15 de agosto de 1967, hace exactamente 40 años, el artista falleció en Bruselas.