09 Agosto 2007
BAJO LA LUPA. El escándalo de la valija con los dólares roza al ministro De Vido y al titular del Enarse, Exequiel Espinosa. NA
BUENOS AIRES.- El Gobierno nacional despidió esta mañana a Claudio Uberti, uno de los funcionarios vinculados con el escándalo del venezolano que llegó al país con U$S 800.000 no declarados dentro de una valija. Así lo confirmó el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, quien consideró que el saliente funcionario "cometió un error".
"Por primera y única vez hizo algo para lo que no fui debidamente consultado. Le solicité su renuncia, la presentó y fue aceptada por resolución", explicó el ministro, que justificó el desplazamiento de Uberti en que este permitió que un ciudadano venezolano ingresara al país en un avión oficial.
"El Gobierno actúa en salvaguarda de los intereses del Estado. Tuvimos una charla anoche y entendimos que por algunos errores que se cometieron en su visita a Venezuela se incorporaron en el viaje a personas ajenas a la comitiva", indicó. De Vido explicó que el avión fue controlado por una comisión de la Aduana que detectó el dinero y que actuó con absoluta libertad.
Uberti era titular del Organo de Control de Concesiones Viales (Occovi) y el sábado viajó desde Caracas en un avión privado junto con un ciudadano venezolano que intentó ingresar al país con U$S 800.000 no declarados.
Según De Vido, se le pidió la renuncia para preservar la integridad de los actos de gobierno, aunque destacó que el ex funcionario realizó tareas muy buenas en Venezuela y que generó convenios "de extraordinaria consideración".
El ministro no se refirió a los otros dos funcionarios que también se trasladaban en esa nave: el director del Enarsa, Exequiel Espinosa, y la jefa de Relaciones Públicas del OccoviI, Victoria Beresiuk.
Abuso de la buena fe
Por su parte, el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, dijo que hubo un abuso de la buena fe de los funcionarios argentinos por parte de los venezolanos, aunque separó del hecho al presidente Hugo Chávez. "Ellos les pidieron que traigan a una persona que tenía una valija con semejante cantidad de dinero sin que nadie lo supiera", señaló.
El funcionario aclaró que la difusión del hecho no se realizó antes porque no quisieron que Chávez se sienta afectado. Además, deslindó las responsabilidades del titular del Enarsa y remarcó que, si bien el hecho es ingrato, los sistemas de control funcionaron.
"Personal de Migraciones y de la Policía de seguridad aeronáutica le pidieron a todos los que viajaban que muestren sus valijas y pasaportes, y esto habla de una mejora en la calidad institucional. Tengo la tranquilidad de que el presidente Néstor Kirchner ha actuado con máxima firmeza desplazando a los funcionarios para que respondan como ciudadanos y dejando que la justicia actúe", consideró.
En tanto, el ministro del Interior, Aníbal Fernández, aseguró que comprende pero que no justifica que los funcionarios argentinos hayan invitado a un empresario venezolano a subir a un avión charteado por el Gobierno.
El escándalo se suma a otros casos recientes en los que varios funcionarios de la administración Kirchner quedaron involucrados en denuncias de corrupción. (NA-Télam-DyN-Reuters)
"Por primera y única vez hizo algo para lo que no fui debidamente consultado. Le solicité su renuncia, la presentó y fue aceptada por resolución", explicó el ministro, que justificó el desplazamiento de Uberti en que este permitió que un ciudadano venezolano ingresara al país en un avión oficial.
"El Gobierno actúa en salvaguarda de los intereses del Estado. Tuvimos una charla anoche y entendimos que por algunos errores que se cometieron en su visita a Venezuela se incorporaron en el viaje a personas ajenas a la comitiva", indicó. De Vido explicó que el avión fue controlado por una comisión de la Aduana que detectó el dinero y que actuó con absoluta libertad.
Uberti era titular del Organo de Control de Concesiones Viales (Occovi) y el sábado viajó desde Caracas en un avión privado junto con un ciudadano venezolano que intentó ingresar al país con U$S 800.000 no declarados.
Según De Vido, se le pidió la renuncia para preservar la integridad de los actos de gobierno, aunque destacó que el ex funcionario realizó tareas muy buenas en Venezuela y que generó convenios "de extraordinaria consideración".
El ministro no se refirió a los otros dos funcionarios que también se trasladaban en esa nave: el director del Enarsa, Exequiel Espinosa, y la jefa de Relaciones Públicas del OccoviI, Victoria Beresiuk.
Abuso de la buena fe
Por su parte, el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, dijo que hubo un abuso de la buena fe de los funcionarios argentinos por parte de los venezolanos, aunque separó del hecho al presidente Hugo Chávez. "Ellos les pidieron que traigan a una persona que tenía una valija con semejante cantidad de dinero sin que nadie lo supiera", señaló.
El funcionario aclaró que la difusión del hecho no se realizó antes porque no quisieron que Chávez se sienta afectado. Además, deslindó las responsabilidades del titular del Enarsa y remarcó que, si bien el hecho es ingrato, los sistemas de control funcionaron.
"Personal de Migraciones y de la Policía de seguridad aeronáutica le pidieron a todos los que viajaban que muestren sus valijas y pasaportes, y esto habla de una mejora en la calidad institucional. Tengo la tranquilidad de que el presidente Néstor Kirchner ha actuado con máxima firmeza desplazando a los funcionarios para que respondan como ciudadanos y dejando que la justicia actúe", consideró.
En tanto, el ministro del Interior, Aníbal Fernández, aseguró que comprende pero que no justifica que los funcionarios argentinos hayan invitado a un empresario venezolano a subir a un avión charteado por el Gobierno.
El escándalo se suma a otros casos recientes en los que varios funcionarios de la administración Kirchner quedaron involucrados en denuncias de corrupción. (NA-Télam-DyN-Reuters)
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