"Con la Revolución Francesa, la mujer perdió participación"

Las épocas de desencuentros entre varones y mujeres son aquellos momentos históricos en los que prima el individualismo, como la actual; y las épocas de encuentro son, por el contrario, aquellas signadas por una vida en relación, como las que propiciaron, por ejemplo, las ciudades europeas de los siglos XII y XIII. De este, y de otros temas, hablará la catedrática en Historia Medieval de la Universidad de Barcelona Milagros Rivera Garretas en el seminario "Mujeres y varones en la historia de Europa" que comenzará hoy a las 17.30 en la Unsta, hasta el viernes. El curso es organizado por el Instituto de Investigaciones Históricas "Profesor Manuel García Soriano".
En diálogo con LA GACETA, la académica afirmó que los siglos XII y XIII y los primeros años del siglo XIV fueron años de mucha libertad femenina. "El feudalismo, aunque jerárquico, es una sociedad relacional. Ellos valoran mucho la relación. Y la eclosión de la feudalidad coincide con una práctica mucho más corriente en la historia de las mujeres que en la historia de los hombres, que es la práctica de la relación. Además, la ciudad favorece la relación humana, porque es un espacio extremadamente relacional, y más anónimo que el del campo medieval".

-¿Se manifestaba un modo "femenino" de hacer política?
-Las mujeres inventan la "querella de las mujeres", una práctica política fundada en la palabra, en el debate, en el crear opinión. Y esa práctica política existe en las mujeres, y en algunos hombres, hasta la Revolución Francesa. Con la Revolución Francesa, las formas de hacer política cambian mucho, y empieza a tomar protagonismo la acción social de masas. Pero antes, sobre todo las mujeres, trabajan mucho con la palabra.

-Las mujeres pierden con la Revolución Francesa....
-Sí, pierden en participación política, porque nacen los partidos políticos. Y nacen para hacer política entre hombres. Voltaire los funda, y lo hace en contra de las "preciosas", que en el siglo XVII habían inventado el salón, que fue una invención política extraordinaria.

-Y con la crisis de los partidos políticos resurge hoy la voz de las mujeres...
-Sí, y se busca que legitimemos a los partidos políticos que están en crisis, o que legitimemos con nuestra presencia la democracia representativa, que ha sido una gran invención masculina para controlar la violencia masculina. Pero que está en crisis; se vota poco, los propios políticos dicen que es un modelo en crisis, y piden nuestro ingreso, para que los ayudemos a sostenerlo.