La hermana del Presidente pasó un mal momento en Río Gallegos

RIO GALLEGOS.- La ministra de Desarrollo Social y posible candidata a gobernadora de Santa Cruz, Alicia Kirchner, fue violentamente agredida en Río Gallegos por manifestantes que le tiraron del pelo, y le arrojaron huevos y harina a la salida de un restaurante. La hermana del presidente, Néstor Kirchner, había llegado el viernes a la capital santacruceña para asistir al acto de asunción del diputado Daniel Peralta al frente del Ejecutivo provincial y ayer al mediodía fue a almorzar con un grupo de colaboradores al restaurante “Roco”, ubicado en la avenida Roca 1157, a sólo cinco cuadras de la sede de la gobernación.
Según se supo, una docente la vio y dio aviso a sus colegas, que, poco a poco, comenzaron a rodear el lugar en medio cánticos de repudio a la presencia de la ministra, que no visitaba su provincia natal desde hacía un mes y medio.
Para cuando Alicia Kirchner se retiró del lugar, sin custodia policial y acompañada sólo por un reducido grupo de allegados, casi medio centenar de manifestantes la esperaba en la calle. La rodearon, le tiraron del pelo y le arrojaron huevos y harina, en medio del estupor y de la incredulidad de la funcionaria nacional, que, por toda reacción, sólo se rió nerviosamente y se quitó el par de lentes que usa permanentemente.
En medio del repudio generalizado de los manifestantes, que volvieron a tirarle del cabello y a arrojarle harina, la hermana del presidente Kirchner debió caminar varias cuadras hasta que pudo abordar una camioneta Ford 4x4 en la que se retiró del lugar.
El escrache que sufrió la ministra, de quien el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, había dicho el viernes que encuestas de la semana anterior le dan el 63% de intención de voto en el distrito, se sumó así a otros dos incidentes que afectaron a la familia presidencial. El sábado 28 de abril, un agente de seguridad privada robó un camión y, tras recorrer varias cuadras y embestir una docena de vehículos, volcó frente a la casa del presidente Kirchner, quien no dudó en calificar el hecho de “atentado” en su contra.
En tanto, en la madrugada del martes 8, un grupo de docentes rodeó la casa de la madre del Presidente, María Juana Ostoik Dragnic, de 86 años, para manifestar en el lugar, y derribaron algunas vallas, lo que mereció el calificativo de “canallesco” de parte del ministro del Interior, Aníbal Fernández.
Todos estos hechos están enmarcados en la crisis que sufre la provincia a partir del reclamo salarial de los docentes, crisis que en los últimos días le costó la gobernación a Carlos Sancho, que renunció y fue reemplazado el viernes último por Peralta. (DyN-Especial)


Río Gallegos.- La ministra de Desarrollo Social de la Nación, Alicia Kirchner, que fue atacada a huevazos por manifestantes en Río Gallegos, dijo que sentía dolor por el incidente.
“Voy a seguir caminando por mi pueblo como siempre. Yo nunca salí ni por la puerta de atrás ni por la del costado, siempre di la cara. Nunca me imaginé la violencia que se desató; me golpearon, me dieron patadas, me tiraron del pelo, pero esa me la aguanto, el dolor que tengo acá...”, dijo con la voz entrecortada en una conferencia de prensa en Río Gallegos, apoyando sus manos en el pecho.
Con un apósito en la sien derecha, la ministra atendió a los periodistas en el salón Blanco de la Casa de Gobierno provincial, acompañada por el flamante gobernador Daniel Peralta. En un salón colmado de militantes del Frente para la Victoria que fueron a respaldarla, Alicia Kirchner pidió calma para evitar enfrentamientos, ya que frente a la sede gubernamental estaban apostados numerosos docentes y municipales, por lo que el clima era tenso.
La ministra relató que llegó caminando al restaurante para almorzar con familiares y asesores y que la violencia se desencadenó cuando se retiró del lugar. “Nunca creí que podía darse una agresión así. Siempre me sentí una vecina de Río Gallegos y creía que podía caminar por las calles libremente como lo hice siempre”, expresó visiblemente emocionada Kirchner, y pidió prudencia. “La violencia genera violencia y ellos quieren violentarnos”, dijo en alusión a los manifestantes.
“Hay como una ciudad tomada; quieren que no salgamos, que no caminemos por la calle. A los violentos les pido que reflexionen: puede haber diferencias pero el diálogo es muy importante”, sostuvo. (Télam)


Buenos Aires.- El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, sostuvo que la agresión sufrida por la ministra Alicia Kirchner en Santa Cruz esconde intereses políticos, y acusó del hecho a grupos ultraextremistas de los sindicatos docentes y municipales de la provincia. Además, reiteró sus acusaciones contra el intendente radical de Río Gallegos, Héctor Roquel.
Según Fernández, con su prédica sobre las protestas el jefe comunal propicia que todo se descontrole en Río Gallegos. “No se entiende un acto de violencia de esta naturaleza. Esto deja al descubierto que no hay una demanda gremial, sino vocación de sectores que la gente no vota y que, por medio de la violencia, pretenden generar una situación crítica en la provincia”, sostuvo el ministro.  En igual sentido se pronunció el flamante gobernador de Santa Cruz, Daniel Peralta, quien dijo que, ante esta situación, cada vez se vuelve más peligrosa la postura de los docentes. (NA)