08 Mayo 2007
Buenos Aires.- El ministro de Gobierno de Santa Cruz, Daniel Varizat, acusó al obispo Carlos Romanín de transformar su misión pastoral en activismo político y quedó en medio de una polémica con la Comunidad Diocesana, que desaprobó esas declaraciones.
“Sus aseveraciones no responden a la realidad”, afirmó Varizat y subrayó: “Romanín responde claramente a intereses políticos que no sabemos quiénes los marcan”.
La frase de Varizat generó una declaración de la Comunidad Diocesana de Río Gallegos, que expresó -según publicó la agencia católica AICA- su más enérgico repudio.
“Te acompañamos frente a tanto atropello y maltrato; pedimos a María Auxiliadora te bendiga y te ayude a seguir siendo signo de encuentro con la verdad, con la justicia y con la paz que tanto has pedido para todos nosotros en este tiempo”, señala el texto firmado por el vicario general, presbítero Carlos Angel. En tanto, Varizat también tuvo respuestas a las sospechas que lanzó el religioso sobre supuestos teléfonos pinchados en esa provincia, y planteó que “no ha hecho ninguna denuncia concreta en ese sentido”. “Es muy fácil instalar sospechas, alterar el ánimo de la gente desde una investidura como la de los obispos”, desafió Varizat en respuesta a la denuncia de Romanín. El viernes pasado el prelado afirmó que en Santa Cruz quien piensa distinto al Gobierno es considerado “un enemigo al que hay que eliminar”.
Romanín agregó: “se cierran radios, tenemos censura, falta de libertad de expresión, no hay privacidad, yo estoy seguro y tengo sospechas de que mis teléfonos están intervenidos; se atenta contra nuestra dignidad”.
Varizat dijo que en Santa Cruz todos los salarios básicos son bajos y aseguró que él gana 161 pesos de básico como los docentes. “Son 20 años de crisis tras crisis; tenemos una estructura salarial que no responde a la realidad, que fue diseñada en épocas de la hiperinflación”, aseveró. (NA-DyN)
“Sus aseveraciones no responden a la realidad”, afirmó Varizat y subrayó: “Romanín responde claramente a intereses políticos que no sabemos quiénes los marcan”.
La frase de Varizat generó una declaración de la Comunidad Diocesana de Río Gallegos, que expresó -según publicó la agencia católica AICA- su más enérgico repudio.
“Te acompañamos frente a tanto atropello y maltrato; pedimos a María Auxiliadora te bendiga y te ayude a seguir siendo signo de encuentro con la verdad, con la justicia y con la paz que tanto has pedido para todos nosotros en este tiempo”, señala el texto firmado por el vicario general, presbítero Carlos Angel. En tanto, Varizat también tuvo respuestas a las sospechas que lanzó el religioso sobre supuestos teléfonos pinchados en esa provincia, y planteó que “no ha hecho ninguna denuncia concreta en ese sentido”. “Es muy fácil instalar sospechas, alterar el ánimo de la gente desde una investidura como la de los obispos”, desafió Varizat en respuesta a la denuncia de Romanín. El viernes pasado el prelado afirmó que en Santa Cruz quien piensa distinto al Gobierno es considerado “un enemigo al que hay que eliminar”.
Romanín agregó: “se cierran radios, tenemos censura, falta de libertad de expresión, no hay privacidad, yo estoy seguro y tengo sospechas de que mis teléfonos están intervenidos; se atenta contra nuestra dignidad”.
Varizat dijo que en Santa Cruz todos los salarios básicos son bajos y aseguró que él gana 161 pesos de básico como los docentes. “Son 20 años de crisis tras crisis; tenemos una estructura salarial que no responde a la realidad, que fue diseñada en épocas de la hiperinflación”, aseveró. (NA-DyN)