García practicó a la mañana, y a la tarde no falló

No fue una casualidad que Lucas García mostrara una tranquilidad pasmosa a la hora de ejecutar el disparo que le dio el título a Sportivo Guzmán, algo que el club no conseguía desde el lejano 1 de noviembre de 1990.
El arquero había sido el más certero durante el ensayo matutino que habían realizado los "julianos" en el propio campo de All Boys. Hasta sus propios compañeros se mostraron sorprendidos por la capacidad mostrada por el ex arquero de San Martín; hoy convertido en uno de los ídolos de la hinchada "juliana".
"Siempre me gustó patear penales. Con los años traté de perfeccionarme. Por eso, el técnico Chamorro me pidió que, de ser necesario, fuera el último en patear. Si tengo que ser sincero, no pensé nunca que la serie se estirara tanto. Tenía confianza en que mis compañeros pudieran definirla antes. La vida me dio la chance de darle esta enorme satisfacción a nuestra hinchada, que se había quedado un poco triste por lo que había ocurrido el sábado pasado en Atlético", dijo el guardavallas, mientras recibía el enésimo abrazo de sus compañeros y de los simpatizantes que lograron burlar la vigilancia policial e ingresaron al campo de juego.
En cierto momento del diálogo, García se mostró quebrado por la emoción. Fue en el instante en el que le ofrendó la conquista a sus familiares, que siempre lo apoyaron. "Nunca terminaré de agradecerles por lo que me motivaron cuando las cosas no salían como esperaba", señaló García. Luego le regaló el buzo al profesor Nicolás Sánchez. Un trofeo que más de un hincha "juliano" se desvivía por conquistar.Así habló García sobre los segundos de la definición. "Sabía que gran parte de lo que Sportivo había hecho durante el año estaba en mi pie derecho. Por eso, sabiendo que tenía el apoyo incondicional de mis compañeros, lo único que hice fue patear con tranquilidad a la derecha de Herrera. Todos saben que esta clase de definiciones son una lotería, por suerte esta vez nos tocó a nosotros celebrar. También felicito a UTA", señaló el arquero. Después, se unió al festejo del equipo.

Marchesse elogió a sus hombres
A pesar de la derrota, el técnico de UTA, Omar Marchesse, se mostró sereno a la hora de dialogar con LA GACETA.
"Al margen de los penales, UTA demostró, en los dos torneos, que fue el mejor equipo de la temporada. De todas maneras esto forma parte del folclore del fútbol", dijo el entrenador con cierto tono de resignación. "Pero a esto no lo tomó con una derrota. Acá no queda otra cosa que seguir trabajando como lo hicimos hasta ahora. Esta situación es una lástima porque me pongo en el lugar de los jugadores. Pero en estos momentos, como conductor táctico del grupo tengo que darles más fuerza y respaldarlos, porque demostraron que son buenos jugadores, pero mejores personas", acotó quien vivió desde el comienzo este proyecto de la entidad de San Andrés.
Al termino de la entrevista, "Pillapollo" se fue a recibir la medalla que lo acredita como subcampeón. Le fue entregada por uno de los interventores de la liga Eduardo Moussa.
No hay tiempo para lamentos, pues mañana, a las 17.30, en el "Monumental", UTA comenzará su participación en el triangular ante Central Norte.

Desde Villa Urquiza
Cuatro titulos. "En pocos días logré dos torneos, el Clausura y el Anual, y en mi cosecha personal ya llevo cuatro. Somos justos campeones, ya que de los cuatro partidos que jugamos con UTA, ganamos tres. Ahora, a festejar y luego a prepararse para el Torneo del Interior", comentó Javier Rocha, el goleador del equipo durante la serie final del Anual.
La Ultima vez. El 1 de noviembre de 1990, en un partido que se jugó en el estadio de Juan Posse y Juramento, Sportivo Guzmán conseguía su último título liguista. En esa ocasión, derrotó 2 a 0 a Concepción FC con tantos de Luis Iriarte y Marcelo Coria. Ya pasaron 16 años de aquella consagración. En ese plantel estuvo Enrique Chamorro, hoy técnico del equipo.
Inigualable. "La vida me dio la posibilidad de ser campeón en varias ocasiones, pero este título que logré con Sportivo Guzmán tiene un sabor muy especial para mí. Cuando estaba analizando detenidamente mi retiro surgió esta chance de jugar en Sportivo. Era un nuevo desafío en mi carrera y me desvelaba la idea de irme del fútbol celebrando un título con este club que tanto quiero", señaló Martín Anastacio, que vivió la segunda final desde la platea debido a una suspensión.
Merecimientos. "Estos muchachos trabajaron en silencio para devolverle al club el protagonismo que nunca debió perder y se merecen la fiesta. Este torneo mereció otro final. No se les debió impedir a los hinchas que pudieran estar presente en esta celebración por la que tanto bregaron. Pero no importa, ahora vamos a ir a nuestra estadio a celebrar", indicó Javier Martínez, jugador de los "julianos" en la década del 90.