"Tenemos el ascenso en nuestras manos"

Cada vez que termina una tarde feliz, la noche comienza con los chicos y las no tan chicas cerquita de la puerta de los vestuarios. A medida que salen los jugadores, las morenas suspiran, se comen las uñas, les acercan una lapicera, "con mucho amor", les piden. Sale Lavallén, Molina, Salvatore pide un minuto, Antonio busca eludir a una fanática de los postres y así en adelante. Los coordinadores de seguridad piden espacio, pero... "¡ahí está el Ratón!". Y ahí está, ahí viene, se acomoda la melena que oculta las entradas. Cuando intenta salir, no puede. Entonces entramos al vestuario. Es el precio por tratar con Gustavo Ibáñez, "Súper Ratón", "Superstar".
"La ovación cuando salí de la cancha, ahora este cariño... Es muy lindo cuando reconocen que dejé todo en la cancha. Las cosas me salieron bien, ¿no?", pregunta el delantero al que le salieron bien, demasiado bien las cosas, como él llama a sus desbordes, centros, atención para quitarles la pelota a defensores dormidos, y el centro de asistencia a la cabeza goleadora de Juan Cortés. De hecho, comandó los caminos de un ataque súper poblado con las presencias de Morales, de Cristian Zárate y de Pablo Cantero. La idea de Carlos Roldán mereció los elogios de la figura de la tarde.
"Sabíamos que metiendo más gente en el medio y en ataque a ellos se les iba a complicar y por eso creo que el ?Profe? hizo bien el planteo. Nosotros nos encargamos de hacer bien el trabajo", destacó el muchacho que resumió la diferencia que existió entre San Martín de Tucumán y el de Mendoza. ¿Esa es la actitud para ascender?
"Sí, seguro, seguro, esta es la actitud que necesitamos para ascender. En este partido y en el que vamos a jugar en Mendoza; tenemos que jugar de esta manera. Creo que se vio que quedó atrás lo de Villa Mitre", comentó Ibáñez.
La gran actuación de Ibáñez y del equipo en líneas generales, ilusiona al plantel y a los hinchas. "Vamos a salir a ganar el domingo, aunque el empate tampoco estaría mal. Vamos a dejar todo, y si Dios quiere vamos a dar la vuelta. Ahora tenemos el ascenso en nuestras manos. Sólo lamentamos no haber sacado una mayor diferencia en el resultado, pero lo más importante era ganar", cierra el "Ratón" de San Martín, el de la gente.

"Me pisaron detrás de la rodilla"
Gustavo Ibáñez fue reemplazado cuando faltaban 10 minutos para el final. Pese a la ansiedad del momento, la gente ovacionó al delantero. "Quería seguir, pero me pisaron detrás de la rodilla. Salí porque me dolía mucho. Ahora me molesta y espero ponerme bien para la revancha", anheló el "Ratón", que será observado hoy por el doctor Samuel Semrik.

Cortés se reencontró con el gol y les pasó la presión a los mendocinos
La frase es vieja y usada, pero sigue vigente: el fútbol da revancha. Y en este caso lo fue para Juan Manuel Cortés, aunque para el delantero de San Martín, no fue para tanto: "solamente se jugó como lo sabe hacer San Martín: con buen trato a la pelota y con los ojos puestos en el arco contrario".
"Juanchi" no podía ocultar su alegría. No es para menos, el delantero jugó uno de sus mejores partidos, convirtió el gol de la victoria y se fue aplaudido por la hinchada. "Agradezco a la gente por el apoyo que nos brinda. En esta ocasión necesitábamos ganar y se dio. Estamos felices, pero con la mente puesta en el segundo partido", indicó el delantero.
En su monólogo, el goleador que llegó a los 10 tantos le restó importancia a la exigua diferencia con la que llegarán a Mendoza. "La presión la tendrán ahora los mendocinos. Están en desventaja y esto los obligará a salir. Con espacios, crecen nuestras posibilidades de obtener un buen resultado. No vamos a ir a defendernos", explicó.
"En el gol, el Ratón me puso la pelota en la cabeza. Con jugadores como él todo puede ser posible. Este es un gran grupo y merece concretar el ascenso", finalizó el rubio. Y se abrazó con todos.