El remisero Cruzado quiere que le permitan declarar

Juan Cruzado, el remisero que dijo haber llevado a una joven parecida a Paulina Lebbos el día que desapareció, llegó a Tribunales con cara de preocupación, gesto que fue más evidente cuando se fue. Es que el fiscal Carlos Albaca le dijo que, a pesar de haberse puesto a disposición de la Justicia, no le tomará declaración por ahora.

"Esta es una situación muy incómoda porque quiero que todo se esclarezca ya. Hace casi un mes que la Policía tiene el auto que utilizo para mantener a mi familia y no puedo trabajar. Eso me molesta mucho más que lo que pueda decir la gente", aseguró el remisero.

Cruzado se presentó con su abogado Carlos Posse. Además de declarar, pretendía mostrarle al fiscal una serie de documentaciones con la que comprobaría que tuvo un accidente el 29 de diciembre pasado. "No camuflé el vehículo como sostiene la Policía. Lo arreglé porque tuve un percance y nada más", señaló el conductor.

El remisero declaró en la Policía y en la Justicia que, el domingo 26 de febrero, dos jóvenes, que a su entender podrían ser Lebbos y Virginia Mercado, subieron a su remise en avenida Alem y pasaje Gutiérrez. Señaló además que una de ellas se bajó en La Rioja al 400 y otra en Cuba al 1.200. "No me arrepiento de haberme presentado como testigo. Simplemente quería colaborar con la investigación. Es mi obligación como ciudadano", explicó. El conductor del remise Fiat Duna color bordó confirmó además que nunca se reunió con Mercado. "Sólo la conozco por las fotos que publicó LA GACETA", dijo en ese sentido.

Perseguido
Posse se mostró molesto. "Hasta ahora mi cliente no está imputado por nada, pero es perseguido por la Policía. Por ese motivo presentamos un hábeas corpus preventivo", adelantó el abogado. El profesional aclaró además que el fiscal le anunció que Cruzado será citado a declarar en los próximos días y le adelantó que, si lo creía conveniente, podría contratar un perito de parte para cuando se realicen nuevas pruebas al vehículo que está secuestrado.

La pista sobre Cruzado fue profundizada por los tres ex policías que están contratados para colaborar en la investigación. Alfredo Jiménez, Marcial Escobar y Luis Santana le dijeron a Albaca que Cruzado debía ser detenido, pero el fiscal lo rechazó ya que considera que no hay pruebas para inculparlo.

Ahora -teniendo en cuenta que Cruzado no se parece a los identikits que realizó Virginia Mercado- los tres ex comisarios están tratando de averiguar si otra persona, más joven que él, manejó en algún momento ese mismo vehículo. Para eso, están estudiando la composición familiar del remisero y si él en alguna oportunidad contrató a un chofer.