Pide que le permitan declarar

Llegó y, como lo hace desde el jueves, esperó sin éxito que el fiscal Carlos Albaca le tomara declaración. "Estoy harto. No tengo nada que ver en este caso y ni siquiera me dan la oportunidad de decirlo", aseguró Sergio Arroyo (foto). La vivienda de Arroyo, ubicada en Lola Mora al 600, fue allanada el martes. Buscaban unas fotografías de Paulina que, supuestamente, tendía Arroyo. No las encontraron pero secuestraron una camisa, porque sospecharon que la mancha que tenía era de sangre.
"No puedo creer que por una llamada anónima me hayan involucrado en la causa. No tengo nada que ver y quiero demostrar mi inocencia cuanto antes", indicó el joven de 21 años, que trabaja como empleado de una carnicería. Arroyo agregó además que, a pesar de que vive cerca del domicilio de César Soto, el novio de Paulina, no lo conoce, ni conoció a la joven.
Mariela Salazar, la abogada que asiste a Arroyo, se quejó de que el fiscal Carlos Albaca no permita que su cliente declare. "No sólo sigue sin poder hablar, sino que además no puedo determinar cuál es su situación en el caso", explicó. También se mostró molesta por cómo se desarrolló el allanamiento en la vivienda de su cliente. "Sacaron la prenda que supuestamente estaba manchada con sangre y hasta el momento no sabemos si hicieron alguna pericia ni cuáles fueron los resultados", advirtió.