Tres ex comisarios se suman a la pesquisa de la Policía, de la Gendarmería y de la Federal

La investigación del crimen de Paulina Lebbos, a partir del cambio de fiscal, ingresará en un compás de espera de varios días.
Carlos Albaca y Daniel Marranzino, según la opinión de los especialistas, tardarán por lo menos 10 días para estudiar los 22 cuerpos que tiene hasta el momento la causa. En esto serán ayudados por el instructor de la causa, Marcos López Frías, quien trabajará con ellos.
Aparentemente, los comisarios Julio López y Raúl Ferreyra, jefes de la Dirección General de Investigaciones, continuarán al frente de las pesquisas. El jefe de Policía, Hugo Sánchez, los había asignado a cumplir con esta función desde que aparecieron los restos de la joven.
Por otra parte, mientras estudian el caso, tendrán varias cuestiones pendientes. La primera será acompañar al personal de la División Homicidios de la Policía Federal que, desde el miércoles, se encuentra analizando la causa para tratar de encontrar al responsable del homicidio.  También es muy probable que, antes de estar bien informados sobre los detalles de la investigación, reciban los resultados de los estudios que realizó el personal de Gendarmería Nacional que pueden ser claves para esclarecer el caso.
El Gobierno de la provincia ya contrató a tres ex comisarios que pasaron a retiro durante la actual gestión de gobierno para que aporten su experiencia en la investigación del homicidio de Paulina Lebbos.
Al comisario general (r) Alfredo Jiménez se sumaron los comisarios Marcial Escobar y Luis Santana. Según trascendió, los tres fueron contratados como asesores del Ministerio de Gobierno y Justicia de la provincia, pero su función será colaborar con la Policía en el esclarecimiento del polémico caso. Ellos habían participado de la reunión entre el fiscal Alejandro Noguera y el gobernador de la provincia, realizada el miércoles en la casa del mandatario.

A la fiscalía
Por eso no sorprendió que Jiménez, que fue el primer hombre contratado, visitara ayer a Noguera.
El encuentro, que tuvo lugar antes de que se confirmara que el fiscal sería desplazado de la causa, de acuerdo con varias fuentes, tenía como único objetivo darle un marco legal al trabajo que realizarán.
En un principio, se pensaba que los ex policías sólo se dedicarían a asesorar a los hombres de la Dirección General de Investigaciones; pero en las últimas horas, les habrían pedido que ejerzan un mayor protagonismo en la pesquisa. Así, son cada vez más los investigadores que analizan el caso; sin embargo, hasta el momento, las pistas para encontrar al asesino son muy pocas. Se busca al remisero que trasladó a Paulina, pues se sospecha que él la habría matado.
Ayer, Alberto Lebbos dijo que tiene la fuerte convicción de que el crimen va a esclarecerse. “Si los que actúan son idóneos, el asesino va a ser descubierto”, dijo. Cuando se le preguntó si no creía que con el cambio de fiscal se atentaba contra la investigación, indicó que sí, pero que, como confía en la Justicia, considera que se puede identificar al homicida.
Según trascendió, el informe que elevarán los investigadores de la Federal son lapidarios en cuanto a la actuación de la Policía de la provincia. En él se sugeriría, incluso, que el hecho de que no pueda encontrarse al homicida, en gran parte tendría que ver con las irregularidades cometidas durante la instrucción. En ese sentido adelantaron que esperan que el informe de Gendarmería les confirme cuál fue el modo en el que mataron a la joven.