Una ley que duró sólo un año

Si se concreta la idea de poner un límite horario a los boliches, no sería la primera experiencia del tipo en la provincia. En diciembre de 1994, tras ser impulsada por el ex vicegobernador Julio Díaz Lozano, la Legislatura aprobó la ley 5.140, que establecía las 3 como límite para el funcionamiento de las discotecas.
Esta norma duró menos de un año. Siete días antes de cumplir su primer aniversario, fue derogada por unanimidad durante el gobierno de Antonio Bussi. Durante su campaña electoral, el general retirado había prometido que dejaría sin efecto esta ley, que en realidad no fue cumplida por todos los propietarios de boliches mientras estuvo vigente.
“Una de las consecuencias de esa ley fue que los drugstores se convirtieron en los mayores expendedores de alcohol a menores de edad. Y además, se produjeron cientos de hechos delictivos, desde peleas hasta violaciones, porque los chicos salían de la discoteca y se quedaban deambulando en la calle. Y eso no puede volver a pasar”, aseguró Rodolfo Di Pinto, presidente de la Cámara de Propietarios de Discotecas y Afines de Tucumán.
En 2000, los legisladores Gerónimo Vargas Aignasse (PJ) y Julio Díaz Lozano (PJ) trabajaron por separado en dos proyectos para modificar la Ley de Contravenciones Policiales. Proponían poner como límite para el cierre de los boliches las 3 o las 4.30. Ninguna propuesta prosperó.

A favor de la medida
“Me parece bien que los boliches cierren más temprano. Es una locura que los chicos anden hasta tan tarde y que haya tanta violencia en los boliches. Es horrible ver a las chicas borrachas, tiradas en la calle”, sostuvo Lidia Gerna, madre de dos adolescentes. Lo mismo opinó Gladis Brito, otra mamá, que aseguró que debe dejar salir a sus chicos de noche por la presión social que existe, aunque ella no está de acuerdo con que regresen a sus casas al alba. “Tendría que haber un servicio nocturno de colectivos”, agregó.