10 Julio 2005
ROSARIO.- La causa por la desaparición de Marita Verón sufrió un nuevo giro. La Policía de esta provincia allanó un prostíbulo ante la sospecha que la joven, que habría sido secuestrada por una banda de proxenetas, estaría ejerciendo allí la prostitución.
María de los Angeles Verón fue secuestrada el 3 de abril de 2002 en las cercanías de la Maternidad. Según las denuncias realizadas por la madre y a raíz de la investigación efectuada por la Justicia, la joven habría caído en las redes de una banda que se encarga de la trata de mujeres a nivel nacional e internacional.
La sospecha de que Verón estaría en Rosario surgió a partir de una llamada telefónica a una radio tucumana. Una mujer, que no quiso dar su nombre por cuestiones de seguridad, dijo que a su hijo, un médico rosarino, le había sucedido algo extraño. Fue llamado para atender a una mujer en prostíbulo porque estaba enferma. Mientras el profesional la revisaba, esta le habría dicho: "soy tucumana; me tienen secuestrada y mi mamá hace varios años que me busca. Por favor, llame a una radio de Tucumán y dígales que estoy aquí".
Al recibir la comunicación, la producción de la radio se comunicó con Susana Trimarco, madre de Marita, que de inmediato se puso en contacto con la Oficina Antiimpunidad del Ministerio de Justicia.
Los funcionarios se pusieron en contacto con Luis María Caterina, juez de turno de Rosario. Este ordenó un allanamiento en el prostíbulo que está ubicado en el coqueto barrio Martin, a escasos 200 metros de la delegación rosarina de la Policía Federal.
El procedimiento se realizó a las pocas horas y arrojó resultados negativos. Tampoco encontraron pistas firmes de que Marita hubiera estado ejerciendo la prostitución en ese lugar. Las mujeres que allí trabajan fueron interrogadas y todas aseguraron que no conocían a ninguna tucumana.
Sin embargo, las pesquisas no descartan que la tucumana haya estado en ese lugar. Ahora tratan de encontrar a la mujer que realizó el llamado y al médico, para ver si puede reconocer a Marita. (Especial)
María de los Angeles Verón fue secuestrada el 3 de abril de 2002 en las cercanías de la Maternidad. Según las denuncias realizadas por la madre y a raíz de la investigación efectuada por la Justicia, la joven habría caído en las redes de una banda que se encarga de la trata de mujeres a nivel nacional e internacional.
La sospecha de que Verón estaría en Rosario surgió a partir de una llamada telefónica a una radio tucumana. Una mujer, que no quiso dar su nombre por cuestiones de seguridad, dijo que a su hijo, un médico rosarino, le había sucedido algo extraño. Fue llamado para atender a una mujer en prostíbulo porque estaba enferma. Mientras el profesional la revisaba, esta le habría dicho: "soy tucumana; me tienen secuestrada y mi mamá hace varios años que me busca. Por favor, llame a una radio de Tucumán y dígales que estoy aquí".
Al recibir la comunicación, la producción de la radio se comunicó con Susana Trimarco, madre de Marita, que de inmediato se puso en contacto con la Oficina Antiimpunidad del Ministerio de Justicia.
Los funcionarios se pusieron en contacto con Luis María Caterina, juez de turno de Rosario. Este ordenó un allanamiento en el prostíbulo que está ubicado en el coqueto barrio Martin, a escasos 200 metros de la delegación rosarina de la Policía Federal.
El procedimiento se realizó a las pocas horas y arrojó resultados negativos. Tampoco encontraron pistas firmes de que Marita hubiera estado ejerciendo la prostitución en ese lugar. Las mujeres que allí trabajan fueron interrogadas y todas aseguraron que no conocían a ninguna tucumana.
Sin embargo, las pesquisas no descartan que la tucumana haya estado en ese lugar. Ahora tratan de encontrar a la mujer que realizó el llamado y al médico, para ver si puede reconocer a Marita. (Especial)
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