
El ex ministro de Economía Martín Guzmán reapareció en la escena pública con una fuerte crítica al rumbo económico del Gobierno de Javier Milei, en especial tras el reciente acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el levantamiento del cepo cambiario. En un análisis difundido en sus redes sociales, Guzmán advirtió que el plan económico vigente se apoya en bases frágiles y podría tener un alto costo para la mayoría de la población.
A través de un extenso texto titulado “MÁS DEUDA CON EL FMI: ¿QUÉ VA A PASAR A PARTIR DEL LUNES Y QUÉ SIGNIFICA PARA VOS?”, el exfuncionario señaló que el Banco Central (BCRA) viene aplicando una estrategia insostenible basada en la venta acelerada de reservas y el mantenimiento de un tipo de cambio oficial artificialmente bajo, con el objetivo de contener la inflación.
Guzmán describió esta política como una “ancla cambiaria”, que inicialmente ayudó a desacelerar los precios, pero que -según su visión- favoreció la especulación financiera: “La cadena de la bici se estaba oxidando”, expresó, en alusión a la llamada “bicicleta financiera” que permitió a inversores obtener ganancias aprovechando la brecha entre las tasas de interés en pesos y el dólar.
En el mismo análisis, Guzmán se refirió al nuevo desembolso del FMI por 15.000 millones de dólares. Aseguró que esos fondos no estarán destinados a reactivar la producción ni a fortalecer la economía real, sino a “sostener el funcionamiento de un esquema basado en deuda externa”.
“Una nueva cadena para la bicicleta”, ironizó el economista, al advertir que los fondos servirán para que los inversores se deshagan de activos en pesos mientras los costos recaerán sobre los sectores medios y bajos.
Guzmán explicó que el Banco Central actualmente tiene reservas netas negativas, lo que implica que ya no dispone de divisas propias para intervenir en el mercado. Según su diagnóstico, esto llevó al Gobierno a utilizar fondos que forman parte del ahorro de los argentinos, incrementando la exposición del país a nuevos shocks financieros.
En ese sentido, alertó que el nuevo esquema cambiario podría enfrentar fuertes tensiones desde el lunes, cuando se reabran los mercados. “Si los operadores perciben debilidad en las medidas, el dólar oficial podría escalar hasta niveles del dólar MEP o CCL”, afirmó.
Advertencia sobre el impacto social
Más allá del análisis técnico, Guzmán hizo foco en las consecuencias sociales del rumbo económico. Afirmó que el nuevo ciclo de endeudamiento externo traerá un ajuste más profundo, deterioro del salario real y mayor fragilidad económica.
“La mayoría de la población será la que pague el precio de esta situación”, concluyó el exministro, marcando un claro contraste con las políticas de la actual administración.