
El ministro de Economía, Luis Caputo, anunció ayer una serie de medida económicas que incluyen: el levantamiento del cepo cambiario para las personas, el establecimiento de una banda de flotación cambiaria para el dólar y la firma de un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Estas son los cinco puntos clave para entender el nuevo escenario de la economía en Argentina.
1. ¿Qué implica el fin del cepo cambiario?
El Gobierno levantó las restricciones cambiarias para personas; ahora los ahorristas podrán comprar libremente dólares en el mercado oficial sin condiciones ni topes vinculados a subsidios, empleo público o beneficios sociales. Es decir, ya no existirá el tope de 200 dólares mensuales, siempre y cuando sea a través de débito bancario. En cambio, si las operaciones son en efectivo por ventanilla se podrán comprar hasta 100 dólares. También se elimina la percepción impositiva sobre estas operaciones, que solo seguirá vigente para consumos con tarjeta en el exterior y turismo.
De esta manera, el Gobierno busca así normalizar el acceso a divisas y acelerar la transición hacia un mercado cambiario unificado. La medida se enmarca en una etapa más amplia de apertura, que incluye mayores facilidades para importar, la habilitación para que las empresas distribuyan utilidades al exterior desde 2025 y un esquema de bandas que regula el tipo de cambio.
En forma paralela, se desactiva el dólar blend, el mecanismo que permitía liquidar exportaciones en un 80% al tipo de cambio oficial y un 20% en el financiero.
2. ¿Qué pasará con el dólar tarjeta y las compras en el exterior?
El dólar tarjeta, que afecta a las compras realizadas con tarjetas de crédito o débito en moneda extranjera para viajes, servicios online o cualquier otra transacción en dólares, seguirá sujeto a la percepción impositiva vigente.
Esto implica que se libera el acceso a los dólares, pero no finaliza la carga tributaria sobre los consumos en el exterior. En principio, se mantendría la posibilidad de abonar el saldo en dólares con dólar billete, de manera que podría optarse por comprar divisas y pagar dólares con dólares, descontando el recargo impositivo.
3. ¿Cómo será el régimen de bandas cambiarias?
La cotización del dólar en el Mercado Libre de Cambios (MLC) podrá fluctuar por oferta y demanda dentro de una banda móvil entre $1000 y $1400. “Dentro de la banda va a flotar libremente sin participación del Banco Central. ¿Dónde va a participar el Banco Central? En las bandas", explicó el ministro Luis Caputo.
El funcionario aclaró que las bandas no serán fijas a pedido del FMI: los límites se ampliarán a un ritmo del 1% mensual similar al actual crawling peg. Esto amplifica el juego de flotación, pero de manera controlada. “Es muy superior a la convertibilidad”, sostuvo Caputo, que señaló que se arranca con una cobertura mucho mayor que durante el período del 1 a 1. El tipo de cambio de cobertura sería de $911 (por debajo de la banda y el oficial).
4. ¿A cuánto se estima que cotizará el dólar el próximo lunes? ¿Qué puede pasar con los precios?
No se puede hacer una previsión precisa. Lo que se sabe es que el dólar empezará a flotar entre $1000 y $1400. Por debajo del valor inicial, el BCRA comprará dólares para mantenerlo, y si el valor del dólar supera el techo, la entidad venderá para que no se escape.
Si bien marzo es un mes alto en materia de precios, el número de inflación dado a conocer en las últimas horas fue mayor al esperado. En este contexto, será crucial el efecto de las medidas económicas sobre los precios. ¿De qué dependerá el impacto? En gran medida, del nivel de confianza que logre restablecer el Gobierno por el alivio que implican los fondos provenientes del FMI.
5. ¿Cuál es el efecto esperado respecto a las reservas del Banco Central?
El primer y más inmediato efecto del acuerdo es el ingreso de divisas frescas. En un contexto en el que las reservas netas del Banco Central siguen en terreno negativo por unos U$S6000 millones, los fondos del FMI representan un respiro para el organismo monetario. Este año tendrá U$S15.000 millones de libre disponibilidad. El total del préstamo es de U$S20.000 millones.
Según la promesa del Gobierno, el Tesoro le cederá ese dinero al organismo liderado por Santiago Bausili a cambio de recuperar las letras intransferibles. Esa suma permitiría afrontar vencimientos claves, como los más de U$S4000 millones que deben pagarse en julio, y reforzar la posición externa del Banco Central. En un escenario ideal, esos dólares actuarían como escudo, sin necesidad de ser utilizados: la sola presencia de reservas positivas podría disuadir presiones especulativas y darle más previsión a la marcha del dólar. Todo dependerá de que el mercado crea que el Banco Central no tendrá que usarlas de manera inmediata.