

Dice el refrán que lo bueno se hace esperar. Y algo de eso está sucediendo con la remodelación del aeropuerto Benjamín Matienzo, una obra que promete mejoras estratégicas para la conectividad de Tucumán.
Esta semana se confirmó una nueva prórroga para la fecha de presentación y apertura de ofertas, en el marco de la licitación pública para adjudicar el proyecto de reforma integral de la aeroestación situada en la comuna rural de Delfín Gallo.
El plazo confirmado por el Organismo Regulador del Sistema Nacional Aeropuertos (Orsna) es el 24 de abril, por lo que los aspirantes a obtener la adjudicación de los trabajos -cuyo presupuesto oficial supera los $48.700 millones a valores de diciembre de 2024, según el pliego de bases y condiciones- contarán con tiempo adicional para cumplir con la documentación de rigor y elevar una propuesta.
Se trata de la segunda prórroga que se comunica a través del sitio web del Orsna, mediante la circular N° 10 de Aeropuertos Argentina. En principio, la fecha original para cumplir con este trámite clave era el 1 de abril; luego, se pospuso hasta el martes 15 de este mes; y finalmente se pasó hasta el 24.
Observaciones
Fuentes del organismo -dependiente de la Secretaría de Transporte de la Nación- indicaron a LA GACETA que los corrimientos en las fechas se produjeron debido a las distintas observaciones y consultas efectuadas por las empresas en la etapa previa a la formalización de las ofertas, algo previsto en el trámite para la adjudicación de este tipo de obras. Sucede que hay “un paquete muy grande” de firmas expectantes de este proceso, y ya se registraron más de 50 empresas interesadas, que si bien solicitaron el pliego de bases y condiciones, resta ver si formalizan una oferta a tiempo, detallaron desde el Orsna.
Con la aceptación de las prórrogas, el objetivo del organismo es responder todas las observaciones técnicas y legales, muchas de las cuales ya quedaron plasmadas en otras circulares. Incluso, está contemplado un período para que las constructoras efectúen una visita formal al Benjamín Matienzo, a fin de poder diseñar mejor su propuesta.
De hecho, no se descarta que, ante el número de firmas siguiendo esta licitación pública, se produzcan nuevas prórrogas.
Por lo pronto, con la última actualización en la fecha, y considerando el tiempo que demanda el estudio de cada oferta, las definiciones sobre la o las empresas que llevarán adelante la obra llegarían para el segundo semestre. Más allá de esto, en la Casa de Gobierno permanecen expectantes de este proceso, y no faltan quienes se aguardan un “guiño” por parte de la Nación: que el acto para el anuncio protocolar de la adjudicación de la renovación del aeropuerto -con un plazo original de 26 meses de trabajo- se lleve adelante en Tucumán y no en las oficinas del Orsna, en Buenos Aires. Sin embargo, no sería sencillo que esto suceda, básicamente, porque esta pauta también está fijada en el pliego de bases y condiciones.
Uno de los interrogantes pasa por cuántas firmas elevarán ofertas. Del medio centenar que requirió la documentación, en el sector empresario estiman que unas 30 podrían formalizar una propuesta. La mayor parte de las interesadas son constructoras foráneas, pero al menos tres empresas tucumanas aspiran a hacerse con la obra. Y aunque no se impongan, se cree que la remodelación del Benjamín Matienzo tendrá un fuerte impacto local en ese sector, dado que, al margen de que sea seleccionada una sola empresa (o una UTE), serán necesarios proveedores tucumanos para la mayor parte de los rubros, explicó un constructor que pugnará por la obra.
Un proyecto clave: para cerca de 1.500.000 pasajeros anuales
La remodelación del aeropuerto Benjamín Matienzo, que requerirá una inversión estimada en más de 50 millones de dólares -según el anuncio oficial-, permitirá operar con unos 1.500.000 pasajeros por año (el doble que en la actualidad). Además, posibilitará la salida de vuelos domésticos e internacionales en simultáneo. El proyecto fue llevado a cabo por Aeropuertos Argentina, en conjunto con el Orsna, y su ejecución se concretará con financiamiento del Fideicomiso de Fortalecimiento del Sistema Nacional de Aeropuertos. Si bien se prevén tareas por 26 meses, el plan de trabajos contempla que la llegada y partida de vuelos no se suspendan por las obras.