
La Policía de Tucumán dio un paso trascendental en la cooperación internacional en materia de seguridad, al brindar una capacitación clave a efectivos del Estado Plurinacional de Bolivia. A través del Primer Curso Nacional de Negociador Policial en Situaciones de Crisis, un total de 50 agentes de la Policía Nacional boliviana se formaron con instructores especializados de la fuerza tucumana.
El curso fue dictado en el departamento de Oruro, tras una invitación oficial realizada por la Unidad Especial Delta de ese país. La delegación argentina estuvo encabezada por el comisario inspector Mariano Domínguez, director de Fuerzas Especiales CERO, quien destacó la importancia de esta experiencia.
“Fue una grata sorpresa recibir la convocatoria desde Bolivia. Para nosotros fue un honor que, entre todas las fuerzas de Sudamérica, eligieran a Tucumán para dictar este curso. Contamos con el respaldo del ministro de Seguridad, Eugenio Agüero Gamboa, y del gobernador Osvaldo Jaldo, quienes autorizaron y celebraron nuestra participación”, expresó Domínguez.
La capacitación estuvo a cargo del Cuerpo de Instructores de la División de Negociación Policial de Tucumán. Al concluir el curso, cada uno de los nueve departamentos de Bolivia cuenta con al menos un negociador formado en técnicas de resolución de crisis, como toma de rehenes, secuestros, motines, violencia doméstica, atrincheramientos o amenazas terroristas.
“El negociador policial actúa como interlocutor directo entre las fuerzas de seguridad y la persona en crisis, buscando resolver la situación sin el uso de la fuerza. Este tipo de intervención especializada busca evitar desenlaces violentos y prioriza la contención emocional, la negociación y la comunicación efectiva”, explicó el subcomisario Milcíades Ávila, también integrante de las Fuerzas Especiales CERO.
Ávila valoró el camino recorrido por la fuerza tucumana en materia de formación y profesionalización. “Gracias al impulso de las nuevas gestiones ministeriales y de la Jefatura de Policía, venimos desarrollando una fuerte política de capacitación, que no solo tiene impacto a nivel local o nacional, sino que ya traspasa fronteras. Haber formado a 50 negociadores en Bolivia nos posiciona como referentes regionales en este tipo de intervenciones complejas”, afirmó.
La experiencia, calificada como “exitosa” por ambas partes, abre la puerta a futuros intercambios y capacitaciones internacionales, y consolida a Tucumán como un actor clave en la cooperación en seguridad dentro de la región.