
Desde el cielo puede verse su redondez perfecta. Un círculo flotante idéntico a un óculo, regido por una antigua deidad o que es lugar de aterrizaje de objetos no identificados (OVNIs), dependiendo de las versiones que se oigan. Lo que es certero es que la isla de "El Ojo" es una inquietante proeza de la naturaleza que se halla en nuestro país.
Un artículo de la reconocida revista Live Science hizo foco en una misteriosa isla que pasea por el pantanoso Delta del Paraná en nuestro país. Su nombre, El Ojo, proviene de su sorprendente parecido con un óculo perfectamente redondo visto desde arriba.
Cómo decsubrieron El Ojo
Los cineastas llamaron la atención sobre El Ojo en 2016 tras investigar material para un documental en el delta del río. El equipo, liderado por el director argentino Sergio Neuspiller, sobrevoló la isla y quedó impresionado por su aspecto entre la vegetación recortada del delta.
"Encontramos el círculo perfecto, como se ve desde el aire", declaró Neuspiller al periódico El Observador en aquel momento en un artículo traducido. "El agua parecía negra, pero en realidad era completamente transparente, algo casi imposible de encontrar en el delta [porque las aguas suelen ser turbias], pero tenía un fondo de tierra negra".
Las inquietantes particularidades de El Ojo
El Ojo flota en un lago cristalino, tan perfectamente circular como la propia isla. Según El Observador, la isla y la orilla del lago han creado mutuamente sus suaves contornos gracias al lento y demoledor proceso de erosión.
La isla, de 118 metros de diámetro y compuesta de materia vegetal, flota en una corriente que rodea el lago, lo que hace que el círculo gire sobre su eje y roce contra las orillas. Este movimiento constante significa que El Ojo ensanchó el lago y tallado sus laderas en un disco perfecto.
Los misterios que guarda El Ojo
El Ojo se mueve y lo hace en sentido horario. Aún no se sabe con certeza cómo ni cuándo se separó la isla de la tierra, pero apareció por primera vez en imágenes satelitales hace casi 20 años.
Mientras investigaban la región, Neuspiller y su equipo descubrieron que los residentes locales conocían El Ojo, pero que algunas personas le temían debido a la creencia de que una antigua deidad habita allí. Otras teorías sobre la isla sugieren que atrae objetos voladores no identificados (OVNIs) y alberga una base nazi, según El Cronista, pero no hay pruebas que respalden estas afirmaciones.