Tras el decreto anunciado el pasado 28 de marzo por el gobierno liderado por Georgia Meloni, surgieron muchas inquietudes y preocupaciones respecto a la solicitud de la ciudadanía italiana y de la situación de quienes ya la poseen. Una de las incógnitas corresponde a la pérdida del derecho con la ley aprobada por el Consejo de Ministros de Italia.
La ley-decreto aprobada el mes pasado y puesta en vigencia inmediatamente advirtió que solo las personas que tengan al menos un padre, madre, abuelo o abuela nacido en Italia podrán optar por la nacionalidad italiana. Antes del anuncio no existía un límite generacional, e incluso se podía obtener el derecho si se contaba con un familiar nacido después de 1861.
Causal por "pérdida o desuso"
Ahora, con el endurecimiento del requisito para acceder a la nacionalidad, muchos países que recibieron inmigrantes italianos en la segunda parte del siglo XIX y principios del siglo XX se vieron afectados. En Argentina, muchos solicitantes se encuentran bajo la completa incertidumbre. Para aquellos que aún desean iniciar el trámite, se debe contar con un ancestro italiano y reunir una serie de documentos como actas de nacimiento, matrimonio y defunción, los cuales deben ser legalizados y traducidos al italiano.
Respecto a quienes ya se naturalizaron italianos, el riesgo de pérdida no sería inminente. Sin embargo, en uno de los proyectos de ley, que aún no fue presentado pero figura en el comunicado de prensa que publicó el gobierno de Giorgia Meloni, existe la intención de "introducir una nueva causal de pérdida por desuso".
Mantener un vínculo efectivo con Italia
Si bien las nuevas restricciones no contemplan la anulación automática de la ciudadanía italiana de quienes ya la tienen, existen intenciones por parte del gobierno de Italia de introducir una "causal de pérdida por desuso". Según explicó a Clarín el abogado Mariano Santillán Rafaniello del estudio que lleva su nombre, el proyecto de ley contempla que si durante 25 años no se tuvo un "vínculo efectivo con Italia", se podría perder la ciudadanía.
Si bien todavía no hay un detalle sobre lo que implicaría mantener un "vínculo efectivo" y si la intención es aplicarlo hacia adelante o de manera retroactiva, Rafaniello indicó que teniendo en cuenta lo que ya rige en otros países de Europa, esta cláusula podría hacer referencia a movimientos vinculados a la actividad consular como tramitar el pasaporte, votar desde la Argentina y hacer notificaciones al anágrafe (el equivalente al registro civil de la comuna donde se gestionó la ciudadanía)".
Qué sucederá con quienes tienen la ciudadanía
El presidente del Movimiento Asociativo Italianos en el Exterior (MAIE), Ricardo Merlo, aseguró que "quien ya la tiene no la pierde de ninguna manera". Sin embargo, es importante que estas personas cumplan con las normativas y no realicen acciones que puedan implicar su desaparición.
Es importante estar atento a los cambios legislativos y tener tu ciudadanía activa a través de la solicitud o renovación del pasaporte, votar en las elecciones italianas o hacer otras notificaciones pertinentes al consulado. Todo ítalo-argentino debería mantenerse informado sobre los requisitos consulares, como la inscripción en el AIRE (Anagrafe degli Italiani Residenti all'Estero) y la actualización de datos, para evitar complicaciones.