En el polémico informe dado a conocer en los últimos días, los especialistas no sólo detectaron las irregularidades, sino que también plantearon una serie de medidas que se pueden tomar para tratar de lograr la reorganización territorial de El Cadillal. Entre otras cuestiones establecieron:
1- Después de hacer un pormenorizado estudio, definir cuáles son la zonas que pueden ser enajenables, es decir la que pueden ser transferidas o vendidas.
2- Iniciar los trámites para recuperar las tierras que fueron enajenadas legal o ilegalmente.
3- Liberar de construcciones ilegales las rutas provinciales 312 y 347.
4- Categorizar la superficie enajenable, en función del daño ambiental de la usurpación y desmontes realizados en zonas protegidas.
5- Delimitar las áreas que deben preservarse y controlar que no sean ocupadas, como ocurre en la actualidad.
6- Establecer lugares donde se pueda desarrollar actividades sin generar daños al medio ambiente.
7- Tomar medidas para proteger los yacimientos arqueológicos de El Cadillal.
8- Establecer con los habitantes de los barrios un ensanche de las calles internas de esos lugares.
9- Disponer que en algunos sectores las construcciones pueden ocupar sólo un 30% de los terrenos para disminuir los efectos negativos contra el medio ambiente.
10- Proponer estímulos al uso de biodigestores para el tratamiento de aguas residuales, para evitar la contaminación del embalse con líquidos cloacales, asociado al uso de agua de consumo.
11- Considerar la valuación de las plusvalías urbanas a favor del Estado, con la futura revalorización de los terrenos ya regularizados, insertos en un Parque Provincial.