

En un mundo en constante cambio, las universidades deben adaptarse a las nuevas demandas de los estudiantes y del mercado laboral. En ese afán, la Universidad del Norte Santo Tomás de Aquino (Unsta) verificó un crecimiento significativo en la matrícula de dos carreras nuevas con cuatro años de duración: Ciencias Sociales y Ciencias del Comportamiento. Este fenómeno refleja el interés creciente por entender la complejidad de las sociedades y de la conducta humana. Con entrevistas a docentes y estudiantes, LA GACETA exploró por qué estas carreras están marcando tendencia en el panorama universitario local.
Lorena Sarverry, directora de la carrera de Ciencias Sociales de la universidad privada más antigua de la provincia, destacó el impacto que tuvo la modalidad de enseñanza tanto presencial como a distancia. "Comenzamos de manera presencial en 2022 y, al año siguiente, lanzamos la modalidad 100% a distancia", explicó Sarverry. Esta forma de cursado ofrece flexibilidad a los estudiantes, se adapta a sus necesidades y permitiendo el acceso a la educación universitaria desde cualquier lugar del mundo.
“Tenemos un gran número de alumnos de otras provincias e incluso de otros países cursando la carrera”, contó Lorena. Son más de 100 los que cursan presencialmente la carrera mientras que el número se duplica en la versión virtual. “Hoy son muchos más los alumnos que se inscriben en la modalidad a distancia ya que la mayoría estudia y trabaja”, sumó.
La estructura del plan de estudios, que abarca múltiples disciplinas como filosofía, sociología, economía y derecho, se convirtió en una de las claves de su éxito. "Está diseñado para preparar a los alumnos con herramientas metodológicas y prácticas que les permitan insertarse fácilmente en el mercado laboral", comentó la directora.
Uno de los aspectos diferenciadores es el enfoque modular que permite a los estudiantes concentrarse en una materia a la vez, lo que favorece una inmersión profunda en los contenidos. Mediante trabajos finales integradores, los estudiantes aplican sus conocimientos a problemas reales de la sociedad. En ellos desarrollan habilidades que les permiten trabajar en una variedad de sectores: desde la administración pública y la consultoría, hasta la docencia y la investigación.
"Estaba entre la psicología y algo relacionado con lo social, y, cuando descubrí la Licenciatura en Ciencias Sociales, supe que era lo que estaba buscando", contó Miqueas Córdoba, estudiante avanzado. Para él, la carrera impulsa a realizar un viaje propio hacia la verdad y el conocimiento. Lo que más le atrajo fue la flexibilidad del plan de estudios, que le permite trabajar en varios proyectos simultáneamente, un aspecto esencial para quienes, como él, quieren combinar distintas áreas de interés.
En cuanto a la proyección laboral, Miqueas destacó que la carrera abre múltiples puertas, desde la investigación científica hasta el periodismo y la docencia. También señaló que las especializaciones, como la sostenibilidad o el análisis de Big Data, abren nuevas puertas. "Espero que las futuras camadas de egresados encuentren aún más oportunidades laborales, gracias al camino que estamos pavimentando los primeros", agregó.
Ciencias del Comportamiento: un campo emergente
Por otro lado, la Licenciatura en Ciencias del Comportamiento atrajo a estudiantes interesados en disciplinas como la neurociencia, la inteligencia artificial y la psicología. Se trata de una nueva oferta académica 100% virtual, única en el NOA y la segunda de su tipo en Latinoamérica. En palabras de Alejandro Chamatropulos, director de la carrera nacida en 2023, las Ciencias del Comportamiento son un grupo de disciplinas que a través de abordajes conjuntos estudian tanto los procesos de toma de decisiones como la “arquitectura” de la conducta en el marco de diversos contextos y situaciones. “A partir de ello se pueden comprender, explicar, promover, y predecir conductas y decisiones con más facilidad”, detalló Chamatropulos.
Gonzalo Mercau Cossio, coordinador de Ciencias del Comportamiento, resaltó que los egresados tienen amplias posibilidades de insertarse en diversos campos, como el diseño de políticas públicas, el comportamiento del consumidor, y el análisis de datos en empresas y organizaciones. "Nuestro objetivo es formar profesionales estratégicos que comprendan y mejoren el comportamiento humano en diversos contextos", comentó Mercau.
"La carrera me permitió vincular conocimientos de neurociencia y comportamiento humano con el desarrollo de una startup en el ámbito educativo", expresó Marianela López, alumna de esta licenciatura, quien creó Empujón Educativo, una empresa que utiliza inteligencia artificial para personalizar trayectorias de formación.
“A los que están barajando Ciencias del Comportamiento, les diría que piensen esta carrera como una plataforma para crear algo propio. Que se acerquen con una mentalidad proactiva y una fuerte búsqueda de aprendizaje autónomo”, aconsejó López.
Con estas dos nuevas carreras, la UNSTA se posiciona a la vanguardia en la formación de profesionales capaces de comprender y transformar la realidad social. El enfoque interdisciplinario, flexible y orientado a la práctica de las carreras de Ciencias Sociales y Ciencias del Comportamiento ofrecen un futuro prometedor para aquellos que buscan generar un impacto positivo en la sociedad.