
En la última sesión de la comisión del Senado que trató el proyecto de ley de emergencia para Bahía Blanca, el senador por Tucumán, Juan Manzur, expresó duras críticas hacia la política de salud del gobierno de Javier Milei, particularmente en relación con la aparición de enfermedades erradicadas en el país.
Durante su intervención, el legislador peronista destacó la importancia de tratar con urgencia los temas vinculados a la infraestructura sanitaria, resaltando que el daño causado por el desastre natural en Bahía Blanca no puede esperar. “La emergencia está más que justificada por la magnitud de la tragedia que todos pudimos presenciar. Vimos que se ha dañado mucha infraestructura que no puede esperar, sobre todo, lo que respecta a la infraestructura sanitaria. Eso es una urgencia”, afirmó el senador, quien también ofreció sus condolencias a las víctimas fatales y sus familias.
"Hay que evitar en un futuro muy cercano son las enfermedades que originan la magnitud de esta tragedia", añadió. "Las enfermedades por transmisión hídrica no esperan. Ahí, hacen falta recursos y los fondos", insistió, haciendo hincapié en la importancia del "Estado presente, a la par de los ciudadanos".
El tono de su discurso se tornó más contundente cuando abordó los temas sanitarios y las decisiones de la administración libertaria. En su intervención, criticó el reciente "retiro de Argentina de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS)". “Nos enteramos que, de un día para el otro, sin ningún criterio y sin ninguna justificación, abandonamos la OMS y la OPS. ¿Cuál es el criterio para tomar este tipo de decisiones? Desde 1947 estamos trabajando ininterrumpidamente trabajando con la OMS. ¿Por qué se toman estas decisiones que van en detrimentos del pueblo?”, expresó.
El senador también lamentó la reciente decisión de cerrar el Instituto Nacional del Cáncer, una entidad creada en 2010-2011 con el apoyo de Cristina Fernández de Kirchner. “Estamos desmantelando un organismo con prestigio internacional, como es el Instituto Nacional del Cáncer, que lucha contra la segunda causa de muerte en Argentina. ¿Cuál es el criterio detrás de esta decisión?”, cuestionó.
Uno de los puntos más alarmantes que el senador destacó fue el resurgimiento de enfermedades que estaban erradicadas en el país, como el sarampión, y el impacto que esto tiene sobre la salud pública y el presupuesto estatal. “Han vuelto enfermedades que estaban erradicadas. Tenemos sarampión de nuevo, y van a seguir apareciendo otras enfermedades porque han desmantelado un organismo con prestigio internacional, como lo es el ámbito de vacunación en el Ministerio de Salud de la Nación”, subrayó, añadiendo que “las enfermedades generan costos excesivos luego para el Estado”.
El legislador también hizo hincapié en la importancia de la prevención, como "el calendario de vacunación pública, gratuita y obligatoria más importante del mundo". Citó el caso del cáncer de cuello de útero, una patología que hoy puede ser evitada gracias a la vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH).
"Antes, los padres que tenían plata compraban la vacuan y le ponían a la criatura. ¿Y el resto, cuando hay mujeres con dos tres hijos? Las mujeres pobres eran las que se nos morían. ¿ Cuánto impacta eso en el Presupuesto? ¿Cuánto es el presupuesto para eso? ¿Cuánto (cuestan) las internaciones de esas, las cirugías, las conizacnioes de esas mujeres, las radioterapias?", apuntó.
Y continuó: “Cada una de las decisiones en materia de salud tiene un estudio técnico que refleja el costo-beneficio, y ahora estamos tomando decisiones”, advirtió, al tiempo que calificó de "decisiones erradas" a las políticas sanitarias del gobierno de Milei.
El senador concluyó su intervención subrayando la necesidad de volver a un sistema de salud pública basado en la prevención y la equidad.
En este sentido, consideró que el debate sobre la emergencia en Bahía Blanca y la pronta sanción de los fondos para la reconstrucción son pasos fundamentales para atender la crisis actual.
Esta intervención puso de manifiesto la creciente preocupación de varios sectores políticos y sociales sobre las políticas sanitarias implementadas por el gobierno de Javier Milei y el riesgo que estas implican para la salud pública a largo plazo.