Por Jorge Figueroa
24 Febrero 2025
Hosco, duro, franco, denso, “pesado”… Hace 20 años fallecía Norberto Aníbal “Pappo” Napolitano en un accidente con su Harley Davidson, una figura legendario del rock argentino, que integró grupos como Los Gatos, Pappo’s Blues y Riff, participó en el primer y segundo álbum de Billy Bond y La Pesada del Rock and Roll, pero que también tuvo una importante carrera como solista (en el accidente, resultado de una maniobra brusca, también había resultado herido su hijo, Luciano).
Pero recordar la desaparición del músico no pasaría de ser una efeméride si no se tiene en cuenta que están diciendo sus creaciones en la actualidad.
1) Gran parte de su música se produjo en los 90 y no pudo evitar grabar el tema “Mi vieja” (1992), que decía: “mi vieja es una jubilada… Toda su vida laboro sin parar /Nadie se atreva, a tocar a mi vieja/ Porque mi vieja, es lo más grande que hay”. Eran los tiempos de Norma Pla, que encabezaba las marchas de los jubilados reclamando a Carlos Menem y Domingo Cavallo por el monto de las pensiones, principalmente, en el Congreso. El tema “Mi vieja” fue escrito por Eduardo Frigerio (música y letra) y Sebastián Borensztein (letra) para el programa de Tato Bores, pero la grabó Pappo. En ese momento acababa de desarmar Riff y encaraba como solista. Cualquier parecido con la realidad no es casualidad.
2) La película “Los delincuentes” (se puede ver en MUBI), dirigida por Rodrigo Moreno quedó sexta en el Top 10 de 2024 de la prestigiosa revista francesa Cahiers du Cinéma. Y tampoco es casual que la banda sonora sea el tema de Pappo, “¿A dónde está la libertad?” (1971). El director le dijo a LA GACETA que “la historia trata de dos personajes que son empleados de un banco y en un momento de su vida uno tiene un plan para modificarla. La que se le ofrece es una salida liberada de trabajo y del peso de la rutina. “La canción de Pappo” va en sintonía en ese sentido” (https://www.lagaceta.com.ar/nota/1000551/espectaculos/festival-cine-delincuentes-buscan-vida-liberada-trabajo.html). Los dos empleados solo quieren robar del banco una suma de dinero equivalente a todos los sueldos que ganarían hasta jubilarse. Al final, el tema de Pappo suena completo en sus mas de 8 minutos.
3) “Sucio y desprolijo” (1973). No cambia nada estar un poco sucio/ soy un hombre desprolijo…no tengo conflicto con mi ser, porque en la apariencia no me fijo…siguen reprochándome morales…cantan El Carpo y Charly, en un encuentro cumbre e inesperado en Cosquín Rock. La presentación fue el 5 de febrero y Pappo murió el 24.
Para no pocos fue un himno a la autenticidad y una crítica a las normas sociales que imponen cómo debe ser una persona. La letra refleja la cotidianidad de alguien que se siente juzgado por su aspecto y su manera de vivir, pero que, a pesar de ello, se mantiene firme en su identidad y no ve necesario cambiar para satisfacer las expectativas de los demás. La canción tiene como temática principal no juzgar a algo o alguien por su apariencia, o su forma de ser. ¿No es acaso en estos días un reclamo conquistado por las disidencias sexuales y pareciera que tendrá que volver a ser disputado, el ser diferente?
Estas tres canciones son algunas de las que hablan directamente a nuestros días.
Pasión “fierrera”
Su pasión “fierrera” hizo que llegara a correr, aunque en forma esporádica, nunca con continuidad, en Turismo Carretera y se jactaba de tener su propio taller. No se privaba de decir lo que pensaba, y hasta por momentos era una persona violenta. Una vez dijo: “Spinetta (Luis) es un genio; Charly García; no. Es un talento, pero no un genio”.
Además de los grupos nombrados párrafos arriba, también tocó para Manal y Los Abuelos de la Nada.
No tenía problemas de presentarse ante la opinión pública como una persona llana, divertida, pero, en paralelo, desarrolló una imagen hosca, polémica y, en distintas ocasiones, ligada a episodios violentos.
“Loco, en el otro escenario paren de hacer ruido al pedo. Toquen rock and roll en vez de esa estupidez”, gritó en el festival Cosquín Rock, quejándose por la actuación del grupo Catupecu Machu. Pero no fueron los únicos a quienes criticó. “Si el rock es Seru Girán, estamos muertos. Es muy buena música, pero no es rock”, definió en más de una oportunidad. Y acusó a Charly de “ablandar el rock”. “Y no me digas que Fito hace rock, dejate de joder”.
En el Madison Square
Cuando B.B. King lo tuvo de telonero en 1992 en Obras Sanitarias, quedó encandilado y lo convocó a tocar en el Madison Square Garden, en Nueva York. En agosto de 1993, el histórico músico lo presentó así: “En 42 años de carrera, conocí 68 países y muy buenos músicos. Esta noche estamos muy orgullosos de tener un invitado especial, uno de los más grandes del mundo y al mejor de Sudamérica. Damas y caballeros, desde la Argentina: Pappo”.
Admirador de clásicos guitarristas de blues, El Carpo, como también se lo conocía, encontró la síntesis de sus aspiraciones musicales cuando escuchó a Eric Clapton y, con el paso de los años, luego de algunos viajes, sumó elementos del rock pesado de bandas como Motorhead, que terminaron de definir su personalidad artística. Aunque algunos sospechan que el grupo inglés tomó en préstamo algo de Pappo.
Pappo no solo tocaba blues y rock pesado, sino que reconocía en su propio cuerpo esa cultura, con camperas negras de cuero, tachas de metal y cadenas.
“Fue un coloso. Alguien totalmente irreemplazable. Sus rítmicas y sus solos son inigualables”, lo definió Vitico, y uno de sus grandes socios musicales.
Pappo, se acercó siempre a importantes músicos de rock y del blues argentino e internacional, entre ellos, John Bonham de Led Zeppelin, Lemmy Kilmister de Motörhead y el bluesman estadounidense B. B. King, quien lo invitó a zapar, en vivo, en el Madison Square Garden de Nueva York en 1993.
A través de todos sus grupos movilizó mucha gente, vendió millares de discos y es uno de los más sinceros, apoya la verdad, confiesa que imitó, pero que otros también lo hicieron, se puede leer en la revista Pelo n° 163 (1982). “Toda mi vida imité a Eric Clapton, a Hendrix (Jimi), no es que les robo, también pongo lo mío”, precisó. Y sobre su futuro fue claro: “Yo voy a tocar hasta que me muera”. Cumplió.
Así como se enojaba con algunos músicos y los criticaba, siempre se recuerda cuando en la televisión lo hizo con los dj¨s.
Los dj´s
La mejor intervención televisiva de Pappo fue en el 2000 en Sábado Bus, conducido por Nicolás Repetto. En un rincón él, en el otro DJ Deró. En el medio, Repetto.
Durante el programa Deró brindó: “Por toda la gente que sale los fines de semana a bailar y porque la escena dance siga triunfando en el mundo”. Pappo: “Yo brindo porque la música tocada en vivo por seres humanos triunfe”. Repetto: “Bueno, Pappo, los DJ’s también tocan”. Pappo: “¿Ah, sí? Ahora resulta que uno se pasó toda la vida estudiando un instrumento, viene otro, enchufa todo y te quiere hacer creer que toca”. Deró (a Repetto): “Así como yo respeto que él toque la guitarra, yo toco los discos”. Pappo: “Conseguite un trabajo honesto. Vos tocás lo que otro grabó. Ojalá que pierdas el auto”. Días después, cuando en la desaparecida FM Supernova le preguntaron por qué había ido, Pappo respondió: “Porque quería ganarme el auto y porque las minas que bailan están bárbaras”.
Black Amaya (baterista que tocó con él), hizo una colección de anécdotas con El Carpo. “Fue preso por comer panchos, se peleó con Spinetta por una guitarra, alumbró un show con las luces de un fitito, se hizo el muerto, rompió todo, obligó a Botafogo hacer de él, trompeó a un músico y le tiró dos pesos: “Tomá, para que te compres una cara nueva”, le dijo”, y explicó que Spinetta tenía “otra idea” musical. “Era cultivado y le gustaba la poesía de Rimbaud, aunque con El Carpo leíamos Patoruzito o El Tony”, cuenta Amaya.
Igualmente recuerda que algunos deslices. “Yo no puedo ser fashion nunca. ¡Si soy una bestia! Hasta me quisieron dar el Martín Fierro por Carola Cassini. ¡Una payasada!” A poco más de un año de Caso cerrado (“Algunos deslices,” “Tomé demasiado”) y de regresar con Riff para ser telonero de Motörhead en el Rock & Horses del Hipódromo de La Plata, Pappo intentó ser actor. Tentado por Adrián Suar, hizo de músico y fierrero en Carola Cassini, pero se pudrió. “¿Cómo me van a premiar por hacer de mí mismo?”, dijo.
Discos
Sus álbumes de estudio fueron “Plan diabólico (1987), “El Riff” (1990), “Blues Local” (1992), “Pappo y Amigos” y “Buscando un amor” (2003). Pero a ellos hay que agregar los álbumes en vivo, como “Pappo en Concierto” (1984), “Tributo a B.B. King” (2007), “Pappo sigue vivo” (1994).Y está “Juanito y el Carposaurio” (2021), un álbum colaborativo, con Juanse y otros tantos de álbumes recopilatorios.
Allí pueden atenderse el paso del blues, al blues rock, el heavy metal y al hard rock.
En el sitio https://www.elsitiodepappo.com.ar/ el lector podrá encontrar un capítulo especial denominado Anecdotario.
La verdad
Pappó tocó dos veces en esta ciudad, en junio de 1983 en el Club Floresta, con Riff, y en 1994 en el Teatro Alberdi.
En una entrevista que le hizo LA GACETA en 1983, el músico explicó que las cadenas que usaba “no incitaban a la violencia, son un símbolo de unión”. “Nos proponemos decir la verdad y no ponernos en una postura como están la mayoría de los artistas.. El rock pesado es solamente la verdad y aparte, es algo divertido. Este país es de la solemnidad y nosotros no somos solemnes”, dijo claramente.
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