El Año Nuevo chino, es la festividad más importante en la cultura china, se celebra con entusiasmo tanto en el país asiático como en comunidades chinas de todo el mundo.
Este evento marca el inicio de un nuevo ciclo según el calendario lunar y está cargado de tradiciones, rituales y simbolismos que buscan atraer la buena fortuna, la prosperidad y la paz.
Qué se celebra en el Año Nuevo Chino
El Año Nuevo chino tiene sus raíces en antiguas ceremonias en las que se rendían sacrificios a las deidades y a los ancestros con el propósito de pedir paz y abundancia en las cosechas.
Estas celebraciones se remontan a miles de años, y durante la dinastía Tang (618-907 d.C.), se consolidaron y expandieron a lo largo de todo el país. La festividad se convirtió en un momento de unión familiar, renovación espiritual y limpieza simbólica.
Durante el Festival de la Primavera, las familias realizan una limpieza profunda de sus hogares con el objetivo de eliminar cualquier mala suerte acumulada durante el año anterior y preparar el espacio para la llegada de la buena fortuna.
Además, las casas se decoran con adornos de color rojo, considerado un color protector y auspicioso, como faroles, carteles con mensajes de buenos deseos y figuras del animal que corresponde al año.
Otro elemento central es la reunión familiar en una gran cena la víspera del Año Nuevo, donde se comparten platos tradicionales cargados de simbolismo, como el pescado, que representa la abundancia, y los dumplings, que asemejan pequeñas monedas.
Durante los días de celebración, es común asistir a desfiles y espectáculos pirotécnicos, ya que se cree que los fuegos artificiales ahuyentan a los malos espíritus. Además, una de las tradiciones más queridas es la entrega de sobres rojos con dinero a los niños, como símbolo de prosperidad y buenos augurios para el nuevo año.