Entre cascadas y ríos: tres destinos naturales para pasar un día perfecto en Tucumán

Entre cascadas y ríos: tres destinos naturales para pasar un día perfecto en Tucumán

Si no te vas de vacaciones, huir del calor de la ciudad por unas horas es una buena idea. Opciones más allá de los destinos clásicos.

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SAMAY COCHUNA. El camping ubicado cerca de Concepción tiene acceso directo al río Cochuna, lugar ideal para tomar sol y darse un chapuzón. SAMAY COCHUNA. El camping ubicado cerca de Concepción tiene acceso directo al río Cochuna, lugar ideal para tomar sol y darse un chapuzón. LA GACETA/FOTO DE OSVALDO RIPOLL

En plenas vacaciones, hay muchas personas que no pueden hacer un viaje fuera de la provincia. Por suerte, tenemos en Tucumán varias opciones para desconectar del ritmo diario y disfrutar de una jornada de descanso en contacto con la naturaleza.

Más allá de los destinos clásicos -Tafí del Valle, San Pedro de Colalao, El Cadillal o San Javier-, hay otras alternativas cercanas. Aquí tres propuestas para pasar el día, que incluyen vegetación, balnearios, ríos o cascadas, en lugares donde el clima es mucho  más agradable que en la ciudad.

1- Samay Cochuna

Ubicado a 36 km de Concepción, por la ruta 65, el campamento “Samay Cochuna” es un verdadero paraíso. El camping cuenta con 16 hectáreas, con espacios para acampar, un quincho cerrado y sanitarios. Está rodeado por un paisaje montañoso impactante y tiene acceso directo al río Cochuna.

Para llegar hasta el cauce, hay que bajar unos 50 metros por una escalinata. El río, que en esta época del año tiene más de 10 metros de ancho, cuenta con una playa amplia y rocas grandes, ideales para tomar sol.

Cochuna deriva del quechua y significa “quebrada por donde se pasa”. Es el lugar perfecto para escaparse del ruido y desconectarse. El camping está en medio de una exuberante vegetación de selva de yungas; ahí hay un pequeño sendero para hacer trekking.

Se puede pasar el día y también es posible quedarse una o varias noches. Para esto, se recomienda llamar a la Municipalidad de Concepción (al teléfono 03865 22-8154) para corroborar si hay lugar.

2- Balneario La Toma

El río que cruza el balneario La Toma, en Tafí Viejo, y la sombra de la vegetación conforman un escenario ideal para mitigar las altas temperaturas del verano. En ese entorno, hay merenderos, asadores, quinchos y circuitos para caminar.

LA TOMA. En Tafí Viejo, el balneario es atractivo para los visitantes. LA GACETA/FOTO DE OSVALDO RIPOLL

El balneario se encuentra ubicado al final de la calle Uttinger. Hay que dirigirse hacia el oeste de Tafí Viejo, específicamente hasta Perú y Uttinger. La primera cuadra de la calle que lleva hacia La Toma (donde se encuentra el boliche Lancaster) es contramano, por lo que en caso de ir en auto o en moto deberán subir por Monteagudo y luego empalmar por Uttinger.

El recorrido es de 3,3 kilómetros. Caminando, se necesitan unos 50 minutos. En la misma zona también se encuentra ubicado un refugio donde tienen parada las líneas 130 y 131, que llegan desde San Miguel de Tucumán.  

El balneario está habilitado todos los días de 8 a 20. Además, cuenta con cestos para la separación de residuos, baños diferenciados y juegos infantiles. Una de las mayores atracciones es su cascada de agua de vertiente.

VILLA PADRE MONTI. A la cascada escondida se llega por un sendero. LA GACETA/FOTO DE OSVALDO RIPOLL

3- Villa Padre Monti

Visitar Villa Padre Monti y su cascada escondida es un muy buen plan familiar. El paseo para llegar hasta ahí dura aproximadamente una hora. El camino es de dificultad media a baja, y es posible que lo realicen niños.

¿Cómo se llega? Villa Padre Monti está ubicada a 44 kilómetros al norte de la capital tucumana. Una vez que arribamos a la localidad, hay que ir hasta el famoso convento. Justo al lado empieza el camino para ir a la cascada (hay un cartel en donde está pintada la palabra “cascada”). La desventaja de este sendero es que es atravesado por muchos caminos alternativos que pueden crear confusión. Para que esto no suceda, la recomendación es caminar siempre a contracorriente del río, sin perderlo de vista.

En total, son cuatro cascadas que se pueden ver en esta travesía. Las dos primeras están prácticamente pegadas y en ellas abundan los helechos y el musgo. Siguiendo a contracorriente del río y cruzándolo en un par de ocasiones, se llega hasta a la tercera cascada, un salto de agua de unos 10 metros.

Continuando por el sendero  nos encontramos con la más imponente de las cuatro cascadas, que tiene unos 15 metros de altura.

Se aconseja llevar ropa adecuada (pantalones largos ya que  algunas plantas generan ardores  al rozar la piel), protector solar, repelente, y agua. Además, se recomienda hacer el recorrido en grupo, pues no está señalizado y no hay señal en los celulares. Para regresar, siempre seguir el sendero en dirección del agua.

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