Con el inicio del 2025, la temporada veraniega llega a su auge y miles de familias deciden tomarse un descanso al lado del mar. Sin embargo, las altas temperaturas pueden ser un obstáculo del disfrute en la playa si es que no tomamos las precauciones necesarias, entre ellas, las comidas que llevaremos para gozar mientras pasamos las horas bajo el intenso sol costero.
“El verano es el momento en que corremos más riesgos de intoxicación alimentaria. Hace más calor y las bacterias se multiplican muy bien cuanto más calor haga. Además, en la playa o en el campo no somos los más higiénicos", advierte la tecnóloga de alimentos, dietista y nutricionista Beatriz Robles a la revista Telva.
¿Por qué debemos cuidar nuestra alimentación en el verano?
Además, el calor nos sofoca y con frecuencia agota nuestras energías, por lo que se vuelve fundamental prestar atención a nuestra alimentación para que podamos disfrutar de las horas de playa sin vernos cansados o sufriendo de algún malestar estomacal. Comer algo liviano pero que nos ayude a recuperar energías y mantenernos activos es una clave fundamental para afrontar el intenso calor veraniego.
Además de escoger alimentos que sean amables con nuestro estómago, debemos tener en cuenta las condiciones ambientales. "Comer al aire libre reúne las condiciones ideales para que crezcan los microorganismos: nos olvidamos de que en el transporte hay que mantener la cadena de frío, dejamos la comida a temperatura ambiente durante mucho tiempo...", explica Beatriz Robles.
Las recomendaciones para comer en la playa según una especialista
En su libro Come seguro comiendo de todo, Beatriz Robles dedica unas páginas a describir buenas prácticas para que una comida en la playa o la montaña no acaben mal. Así, entre las recomendaciones que hay que seguir a rajatabla están las siguientes:
- Llevá cubiertos y utensilios suficientes: no podés cortar todos los alimentos con el mismo cuchillo sin antes haberlo lavado bien y, en estas situaciones, esto puede resultar complicado.
- Respetá escrupulosamente la manipulación higiénica de los alimentos, desde su preparación al lugar donde los dejas durante la comida. Por ejemplo, no coloques el pan o la fruta sobre la mesa de camping sin un plato o llevá un mantel limpio de casa.
- Siempre respetá la cadena de frío si querés mantener los patógenos a raya.
- Envasá bien, y por separado, los alimentos para evitar que se contaminen en el transporte.
- No dejes neveras ni bolsas de frío con alimentos en el interior del auto, colocalas en lugares frescos, a la sombra.
- Eligí bien el menú: algunos alimentos son un no rotundo, con otros debes tener algunas consideraciones.
- Deshechá las sobras.
Recetas frescas y sanas para disfrutar en la playa
Para disfrutar de horas en la playa sin ningún inconveniente, desde la revista dedicada al bienestar recomiendan dos preparaciones que combaten el calor, nos llenan de energía y sobre todo, son amables con nuestro cuerpo.
Ensalada de lentejas y pimientos
Ingredientes para 6 personas: 300 g de lentejas cocidas, 1 lata pequeña de maíz, 1/2 pimiento verde, 1/2 cebolla morada, 1 lata de pimientos del piquillo. Vinagreta: 1 dl de aceite de oliva suave, 3 cucharadas de vinagre, 2 cucharadas de mostaza en grano, sal y pimienta.
Preparación:
- Cortá en juliana, tiras finas, la cebolla y el pimiento verde. Mezclá con las lentejas escurridas, el maíz y los pimientos de piquillo (que puedes picar previamente).
- Prepará la vinagreta mezclando el vinagre, el aceite y la mostaza. Salpimentá. Aliñá en el momento de comer.
Sándwich con pan integral
Los sándwiches, de pan integral, son otra de las opciones aprobadas por la experta en Nutrición y dietética, además de en Tecnología de los alimentos, para llevarnos a la playa o a un pícnic en el campo. En ellos, además de, como veíamos antes, poner palta, tomate o conservas de pescados, también podemos añadir, por ejemplo queso. Preparalo al gusto con las indicaciones previas.