Nicolás Sánchez y el año perfecto: un ídolo que marcó la historia de Lawn Tennis y del rugby tucumano

El 2024 será recordado como el año más importante en la historia de Lawn Tennis. Es la temporada en la que los “benjamines” ganaron prácticamente todo: Regional del NOA, Torneo del Interior A y Nacional de Clubes. Para celebrar esas conquistas fue clave el retorno de quien -puede decirse hoy- es el máximo ídolo del club del parque 9 de Julio: Nicolás Sánchez. “Cachorro” volvió al equipo de sus amores tras 15 años y lo hizo de una manera que superó cualquier expectativa.

Sánchez había debutado en la Primera de Lawn Tennis allá por 2007 con apenas 18 años; al mismo tiempo recibía su primera convocatoria para un seleccionado nacional. Es que ya como juvenil mostraba cosas interesantes y se proyectaba como un jugador con gran potencial. Aunque, claro, difícil era imaginar lo que lograría durante más de tres lustros de carrera.

Apenas un par de temporadas pudieron disfrutarlo en “La Caldera del Parque”. En 2008 fue parte del equipo que cortó una racha de 26 años sin títulos para Lawn Tennis, tras ganar el Regional del NOA. Lo repetiría en 2009, para luego dejar el club en 2010. En el medio disputó el Mundial M20 con Los Pumitas, con la particularidad de que, por entonces, jugaba más de centro que de apertura. Poco después se hizo dueño de un puesto que no abandonaría jamás, consolidándose entre los mejores aperturas del mundo.

Todo lo que sucedió en los años siguientes es conocido: cuatro Mundiales jugados con Los Pumas, con dos cuartos puestos como mejores resultados; goleador del Mundial 2019; máximo goleador histórico del seleccionado nacional; pasos por el rugby francés, con título en la Champions Cup vistiendo los colores de Toulon (equivalente a la Champions League de fútbol); figura de Jaguares en sus primeras experiencias en el Súper Rugby. Siempre, en el más alto nivel.

Tras un corto paso por Japón, Sánchez volvió a Tucumán. A mediados de junio pasado se sumó a los entrenamientos de Lawn Tennis, para sorpresa del plantel comandado por Álvaro Tejeda. Las jornadas pasaron y el rumor de que “Cachorro” había regresado para quedarse se hizo cada vez más fuerte. Y el jueves 20, Día de la Bandera, se confirmó que jugaría contra Huirapuca, por la cuarta fecha del Regional del NOA.

“No quería venir para un partido de despedida cuando ya esté tirando la toalla; mi intención siempre fue jugar sintiéndome bien, sabiendo que le puedo aportar algo al equipo”, sentenció antes de aquel duelo con “Huira”. Y vaya si le terminaría aportando al equipo.

El sabado 22 junio se concretó ese “re-debut” y fue prácticamente inmejorable. Sánchez anotó 19 puntos y fue el goleador de Lawn Tennis para la victoria por 29-13. “La Caldera del Parque” estuvo colmada y no sólo por hinchas “benjamines”, ya que asistió público de todo el rugby tucumano. En aquel momento nadie sabía cuántos partidos jugaría el histórico apertura de Los Pumas en Tucumán y no querían perderse la oportunidad de verlo.

“Vivir esto es espectacular”, resumió “Nico” tras el partido, que terminó con una invasión de cancha impactante, principalmente por parte de niños y adolescentes que querían una foto, una firma o un saludo de uno de los nombres más importantes de la historia del rugby nacional.

Los partidos y las semanas pasaron, y Sánchez siguió vistiendo la camiseta de Lawn Tennis. Con su habitual calidad, más la sabiduría rugbística propia de los 35 años, “Cachorro” lideró a su equipo ganando todos los partidos que quedaban del Regional, incluida una cerrada final ante Tucumán Rugby en cancha de Cardenales. Así cortaron una racha de 10 años sin trofeos.

En cada club que le tocó visitar la imagen fue la misma: los más jóvenes persiguiéndolo por todos lados, los más grandes disfrutando de su rugby desde la tribuna, con admiración indisimulable. ¿Era el capítulo final para el apertura? Ni de cerca.

Como había ocurrido en junio, la previa de la primera fecha del Torneo del Interior A se cargó de dudas en torno a la presencia de Sánchez. Pero finalmente saltó a la cancha para enfrentar a Los Tarcos, en una categórica goleada de Lawn Tennis por 54-14. Fue el primero de los nueve éxitos que encadenó el equipo de Tejeda en el certamen, hasta conquistarlo por primera vez tras derrotar 30-24 a Jockey de Córdoba como visitante. Igual que en el Regional, “Cachorro” fue el conductor y máximo anotador de su equipo, que exhibió un nivel impactante.

“Después del Regional del NOA pensaba terminar”, confesó Sánchez. Afortunadamente para él, para Lawn Tennis y para el rugby tucumano, decidió seguir. Además de disfrutar en la cancha, el apertura disfrutaba el cariño de la gente en cuanta provincia visitaba. Porque Sánchez es Lawn Tennis, pero también es uno de los jugadores más importantes de la historia de Los Pumas. Y la comunidad de la “ovalada” no lo obvió.

El broche de oro llegaría con el triunfo por 22-17 sobre Alumni, en una “Caldera del Parque” repleta y hasta con exceso de público, para convertirse en el primer equipo tucumano que ganó el Nacional de Clubes. Ese partido terminó de confirmar a Nicolás Sánchez como el ídolo máximo no sólo de su club, sino del rugby tucumano. Todo el país se rindió a sus pies.

“Se me hace muy difícil pensar en seguir jugando. La verdad, no le puedo pedir más al rugby. Me dio muchísimo más de lo que esperaba”, expresó Sánchez esa tarde, todavía con la emoción a flor de piel.

¿Fue 2024 el último año de Nicolás Sánchez como jugador de rugby? Al día de hoy, esa pregunta no tiene respuesta. Pero sí está la certeza de que, de haberlo sido, fue la despedida perfecta para un emblema del deporte tucumano y argentino; un cierre perfecto para el “camino del héroe”, que durante su trayecto, cosechó nada más que elogios y reconocimientos. Por lo que hizo dentro de la cancha, pero sobre todas las cosas, por su comportamiento fuera de ella, virtud que engrandeció su leyenda todavía más.