Un análisis de laboratorio confirmó en los últimos días un caso positivo de rabia paresiante en un bovino. Como respuesta al brote, el Senasa indicó una serie de medidas para evitar que la enfermedad de contagiara en la zona en que se detectó la primera alerta de zoonosis.
El caso fue descubierto en el Paraje La Diosa, Las Lomitas en la provincia de Formosa. Como consecuencia los animales ubicados en 10 kilómetros a la redonda deberán ser vacunados. La medida se dictó con carácter de obligatoriedad por lo que los dueños de los ganados deberán aplicar inoculantes para evitar el contagio.
Qué y cuáles son los signos de la rabia paresiante
Según explica el informe de Senasa publicado en Argentina.gob.ar, la rabia paresiante es causada por el virus rábico, transmitido por el murciélago vampiro común Desmodus rotundus que afecta principalmente a bovinos y equinos y con menor frecuencia a especies domésticas, animales silvestres e incluso a hombres.
Las especies infectadas manifiestan síntomas neurológicos, entre los que se reconocen la inquietud, pérdida de apetito, tendencia al aislamiento, depresión, deshidratación, dificultad postural y ambulatoria, hasta llegar incluso a su muerte. Por eso, al ser una zoonosis, se recomienda evitar la manipulación de animales muertos o que presenten signos clínicos compatibles con la enfermedad.
Qué hacer ante una sospecha de rabia paresiante
El Senasa solicitó que se informara con obligatoriedad cualquier indico. Ante la existencia de animales con sintomatología nerviosa o detección de posibles refugios de estos murciélagos, se debe notificar inmediatamente. Los vampiros serán evaluados, georreferenciados y comunicados al Programa Nacional de Control de la Rabia Paresiante.
Los avisos pueden darse de forma presencial en las oficinas del Senasa de cada provincia o de forma remota por WhatsApp, correo electrónico o desde el formulario disponible en la web del Senasa.
WhatsApp: (11) 5700 5704
Correo: [email protected]
Sitio web Senasa: argentina.gob.ar/senasa