Síndrome de intestino irritable: cómo reconocerlo y qué alimentación seguir para evitar complicaciones

Síndrome de intestino irritable: cómo reconocerlo y qué alimentación seguir para evitar complicaciones

Un trastorno que puede modificar el ritmo de vida de quienes lo padecen.

Los dolores y la distensión abdominal son algunos de los síntomas propios del colon irritable.
29 Diciembre 2024

“El síndrome de colon irritable (SII) es un trastorno frecuente que afecta el estómago y los intestinos, que en conjunto forman el tracto gastrointestinal”, define la Clínica Mayo. Esta condición suele causar cólicos, hinchazón y dolor abdominal y tiene la capacidad para condicionar el ritmo de vida de quienes la padecen.

Pese a que los síntomas del intestino irritable son comunes, no siempre que aparecen son indicadores de esta enfermedad. Por eso es importante aprender a reconocerlos, así como también hacer una consulta con un especialista para iniciar un tratamiento.

Cómo se diagnostica el síndrome de intestino irritable

El síndrome de colon irritable no causa cambios en el tejido intestinal ni aumenta el riesgo de tener cáncer colorrectal. Según explica el National Institutes of Health de Estados Unidos, para diagnosticar el SII los médicos no necesariamente utilizan pruebas o exámenes, sino que se basa en la repetición de los síntomas.

Los nervios y el estrés pueden ser desencadenantes de esta enfermedad que afecta principalmente a mujeres.

Sin embargo, sí puede pedir análisis de sangre, análisis de heces y otras pruebas para buscar otros problemas de salud. En algunos casos el especialista puede pedir una prueba de hidrógeno en el alimento para verificar la proliferación bacteriana en el intestino delgado; una endoscopía esofagogastroduodenal o una colonoscopía para buscar enfermedades como cáncer de colon o enfermedad inflamatoria.

Alimentación para el síndrome de intestino irritable

Al ser una afección crónica, para tratar el síndrome de intestino irritable deben tomarse recaudos que consisten en cambiar algunos hábitos de vida. Por ejemplo, el ejercicio regular y el mejoramiento en los hábitos de sueño pueden reducir la ansiedad y ayudar a aliviar los síntomas intestinales.

Los cambios en la alimentación pueden ser útiles. Sin embargo, no hay una dieta específica puede recomendarse para este síndrome porque la afección difiere de una persona a otra. Se recomienda:

- Evitar alimentos y bebidas que contengan cafeína, té o bebidas con cola, porque estimulan los intestinos

- Comer porciones más pequeñas

- Incrementar la fibra en la alimentación

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