Las fiestas de fin de año son una época de encuentros, celebraciones y emociones a flor de piel. Sin embargo, también pueden traer consigo situaciones que nos generan estrés, agotamiento o incluso malestares. Para superarlas con éxito es fundamental tener en cuenta algunos consejos que nos permitan disfrutar sin descuidar nuestro bienestar. A continuación se desarrollan cinco ideas para sobrevivir a las fiestas de una manera saludable y equilibrada.
1) Momentos de relajación
En primer lugar, una de las claves para no sentir agotamiento durante las fiestas es planificar descansos. Sabemos que la temporada trajo consigo reuniones familiares, cenas con amigos y muchos compromisos, pero es importante encontrar momentos para relajarnos. Si te sientes saturado, un buen consejo es buscar un lugar tranquilo donde puedas respirar profundamente y desconectarte por unos minutos. Este pequeño hueco te permitirá recargar energías y seguir disfrutando sin sentirte abrumado.
2) No comer como si viniera el Apocalipsis
Otro aspecto esencial es moderar el consumo de comida y bebida. Las mesas llenas de comidas tentadoras, pan dulce, turrones y picadas son parte del encanto de las fiestas, pero no hay que dejarse llevar por el impulso... ni sentir que llega el fin del mundo. Si bien es inevitable darse un gustito, es importante mantener el control para evitar excesos. Optar por porciones pequeñas, alternar con agua y evitar el alcohol en exceso son prácticas que pueden ayudarte a no pasarla mal al día siguiente. Incluir opciones más saludables, como frutas o ensaladas, también es una excelente idea.
3) Evitar los asuntos conflictivos
Las reuniones familiares, a veces, pueden generar un poco de tensión o estrés debido a las diferencias de opiniones existentes o a situaciones conflictivas no resueltas. Para sobrevivir a estas circunstancias, lo mejor es tratar de mantener la calma y enfocarse en lo positivo. Si hay temas que sabes que pueden generar fricciones es recomendable evitarlos. Si surgen, recordá que no es necesario ganar una discusión ni tomar las cosas de manera personal.
4) Mantener el autocuidado
A lo largo de las fiestas, es fácil dejar de lado el autocuidado. El exceso de trabajo, las responsabilidades y los acontecimientos sociales pueden hacer que olvidemos nuestras necesidades básicas. Tomarse un momento para uno mismo es crucial, ya sea con una ducha relajante, leyendo un libro o escuchando música tranquila. Es importante que no todo gire alrededor de las expectativas de los demás y priorizar el bienestar sin culpa ni presiones. El estar bien con uno mismo es lo que permite disfrutar de las celebraciones de forma plena.
5) Saber decir "no"
Por último, establecer límites claros es fundamental. Las fiestas no tienen por qué ser maratónicas ni llenas de compromisos interminables. Si sentís que ya es suficiente o que necesitas descansar, no dudes en irte antes de lo previsto. No hay nada de malo en preferir lo que se necesita. Además, es importante que comuniques de manera respetuosa tus límites a los demás para evitar malentendidos o sentirte presionado a hacer más de lo que realmente deseas.