Es media mañana del 25 de diciembre y no hay revuelos afuera de la guardia del Hospital Padilla, uno de los centros de salud pública más importantes de la provincia. Tampoco hay largas filas de pacientes que esperan ser atendidos, sólo un puñado de gente que aguarda por novedades de seres queridos, paisaje que se repetía en el Hospital del Niño Jesús. La Noche Buena y la madrugada de Navidad dejaron buenas noticias: la mitad de emergencias que otros años y ningún fallecido en Tucumán.
Estos datos fueron confirmados por el ministro de Salud Luis Medina Ruiz y el nuevo director del Padilla, el doctor Mario Sardón Traverso, quienes dialogaron con LA GACETA para dar cifras y detalles de lo ocurrido en las guardias, y desear que el Año Nuevo sea recibido con la misma tranquilidad que los festejos navideños.
A las siete de la mañana, la cartera sanitaria recibió todos los informes de los hospitales de tercer nivel de la provincia y al mirar el panorama general, la baja atención se repetía en todos ellos. La causa más común de atención fueron politraumatismos y sólo hubo cinco personas que se quemaron con pirotecnia de forma leve.
Los médicos señalan que el primer factor que intervino para que esto sucediera fue la lluvia de las últimas horas, aunque también consideran que las campañas de prevención que se realizaron en los últimos años empezaron a dar sus frutos.
Las cifras del Padilla
Los pasillos del hospital se encuentran en silencio. Sólo se escuchan los pasos del doctor Sardón, que asumió hace solo una semana la dirección del efector de salud pero sabe de emergencias ya que fue titular de ese servicio por varios años.
“Estuvimos preparados para toda contingencia que pudiera presentarse y teníamos calculado en promedio unos 250 pacientes pero este año se atendió cerca de un 50% menos”, cuenta el médico y aclara que los datos responden a las últimas 24 horas.
“Atendimos a 138 pacientes que estuvieron contenidos todo el tiempo y la demanda más alta empezó más o menos a las 3:30 de la madrugada, con otro pico a las 6:30”, asevera Sardón para luego detallar que la mayor parte de ellos fue por accidentes viales de poca magnitud y heridas leves, además de algunos otros cuadros clínicos
“Hay que tener en cuenta que aunque la gente sale menos cuando llueve, también puede provocar accidentes menores como motos derrapadas. Aunque en esta ocasión no hubo que lamentar ningún herido de gravedad”, describe el director.
En este hospital, no se atendieron heridos por pirotecnia. “En los últimos años ha disminuido muchísimo la cantidad de este tipo de accidentes, gracias a las campañas preventivas que ayudaron a que la población empiece a tomar conciencia y se vea reflejado en las guardias”, remarcó.
En la provincia
Una joven de vestido rojo y sandalias negras con plataformas altas, espera por novedades de una amiga que se había accidentado en la madrugada. Le cuenta a una mujer lo que sucedió, con una moto como protagonista y golpes. La causa más común de consulta en el Padilla y otros hospitales como el Centro de Salud, Hospital Avellaneda, Eva Perón, Hospital de Concepción y de Monteros.
“Se atendieron a 1700 personas en los hospitales de mayor complejidad de la provincia, que son los lugares que reciben a los pacientes más graves”, puntualiza el ministro Medina Ruiz. 986 de ellos eran adultos y 714 niños.
Para desglosar el titular de la cartera sanitaria señala que hasta las 7 de la mañana se atendieron:
- 49 politraumatismos
- 27 traumatismos de cráneo
- Cinco personas quemadas: cuatro niños y un adulto que fue atendido en el Centro de salud pero todos con heridas leves por las que ya recibieron el alta.
- 320 atenciones por la ambulancia 107 de los cuales, 130 fueron de 7 a 19 de ayer y 190 hasta las 7 de hoy.
“La buena noticia es que no hubo fallecidos por causas violentas ni tampoco por accidentes de tránsito”, celebra el médico y añade que las guardias de toda la provincia dieron respuesta a las urgencias, algo que esperan repetir en los festejos de la próxima semana.
Hacia 2025
En sus declaraciones el doctor Sardón observa que usualmente la cifra de pacientes en las celebraciones por la llegada de Año Nuevo puede incrementarse, ya que las salidas y los accidentes suelen ser más frecuentes. No obstante aguardan que ese crecimiento de consultas también sea menor que en épocas pasadas.
“Estamos preparados para dar respuesta pero esperemos que tengamos unas fiestas en paz en alegría y en familia, sin incidentes”, anhela.
Medina Ruíz, por su lado, invita a la comunidad a tener un momento de reflexión sobre todo en estas fechas. “El mensaje que tenemos que dejar es que valoremos la vida y la salud”- considera- “son momentos de festejos y de hacer balances para planificar el año próximo; por lo que es necesario que no haya excesos de ningún tipo, ni de comida ni de bebidas, nos cuidemos entre todos”.