25 Diciembre 2024
No es ninguna novedad la advertencia de que la sal puede ser perjudicial para la salud si esta se consume en exceso. Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), un abuso en el consumo de este alimento puede incrementar las probabilidades de sufrir hipertensión así como predisponer a nuestro corazón a diversos problemas cardíacos. Para reducir su ingesta en nuestra dieta diaria podemos intercambiarlo por otros sazonadores más saludables.
Aunque la mayoría de los especialistas de la nutrición y la salud enfatizan en lo poco saludable que pueden ser las limitaciones en nuestra dieta, lo cierto es que con algunas comidas existe la excepción. Los productos ultraprocesados, las bebidas carbonatadas y los alimentos con exceso de sal son aquellos que debemos reducir la frecuencia en que los consumimos debido a las consecuencias que pueden tener para nuestra salud.
¿Cuáles son las consecuencias del consumo excesivo de sal?
La sal es uno de esos alimentos que es mejor evitar en nuestra dieta. Esto se debe a que un consumo frecuente y excesivo puede ser sumamente perjudicial para nuestra salud. Su ingesta repetida puede resultar en un factor de riesgo para desarrollar hipertensión arterial, problemas en el corazón como insuficiencia cardiaca e infartos, accidente cerebrovascular (hemorragia), daño en riñones que lleva a insuficiencia renal e incluso la posibilidad de presentar cáncer gástrico o colorrectal, entre otros.
Este mineral puede ser reemplazado por otros condimentos que pueden cumplir una función tan efectiva como este, proporcionando sabor a las comidas y sin arriesgar nuestra salud. Irene Domínguez, tecnóloga en alimentos, destaca cuáles son esas especias más saludables que pueden reemplazar al sodio.
Los condimentos más saludables, según los especialistas
"El ajo molido, cebolla, apio, hierbas y especias como albahaca, orégano, pimienta, romero, tomillo, cilantro, perejil, etc. Los científicos han probado diferentes combinaciones en busca de algún producto cuyo sabor se acerque lo más posible al de la sal común y que, a su vez, tenga beneficios", advierte la especialista.
Sonia Lucena, psicóloga experta en nutrición y fundadora del Centro Médico Estético Integral Método FIVE, coincide con Domínguez y añade algunas opciones más: "En las recetas que recomiendo a mis pacientes siempre les digo que hay ingredientes saludables como el ajo y la cebolla que dan sabor y además tienen muchas propiedades, así mismo las hierbas frescas preferiblemente aunque también pueden usarse secas, jengibre, cúrcuma o cítricos pueden proporcionar sabor y disminuir el consumo de sal".
Por último, Salena Sinz, nutricionista de Naturae Nutrición destaca que "los marinados pueden ser una alternativa a las especias. Realizados con grasas, como aceite de oliva, sésamo o maní. Así como incorporando algún tipo de lácteo o fruto seco".
También propone el "jengibre, con alto contenido en gingerol que además de sabor aporta propiedades antiinflamatorias. Sin olvidar la cúrcuma y su principio activo, la curcumina, que debemos saber que se debe acompañar siempre de pimienta negra para conseguir su máximo efecto. El azafrán tan representativo de nuestra cultura es señalado en los últimos estudios como un potente precursor en la mejora de los síntomas de depresión". Por último, "si nos trasladamos a culturas más exóticas, curry, cilantro, cardamomo, canela, hinojo o pimienta de Sichuan".
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