Basurales: ¿y ahora a quién culpamos?

Basurales: ¿y ahora a quién culpamos?

Hace 15 Hs

“Frente a problemas urgentes hay que proponer soluciones participativas”, planteó hace algunas semanas la investigadora Matilde Malizzia y volvió a poner sobre la mesa el eterno problema de los microbasurales desparramados por el Gran San Miguel de Tucumán.

En un estudio publicado por el Instituto de Investigaciones Territoriales y Tecnológicas para la Producción del Hábitat (Inteph, Conicet-UNT) y del Instituto de Ecología Regional (IER, Conicet-UNT) se demostró, en base a información geográfica e imágenes satelitales, que existen cerca de 800 pequeños vertederos en la zona.

El informe se complementa con trabajos de campo y análisis de datos proporcionados por vecinos de distintas ciudades y busca mejorar la relación de la comunidad con su entorno mediante el uso de tecnologías y de la participación ciudadana.

Es sabido que los microbasurales constituyen un potencial riesgo para la salud pública y una amenaza para el medioambiente. De hecho, para la trabajadora social y doctora en Ciencias Sociales, las deficiencias en el tratamiento de estos residuos acumulados continúan siendo un tema pendiente.

Pero, como bien destacó Julieta Migliavacca, secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable del municipio en una entrevista en LG Play, no existe una receta única. Cada microbasural requiere un abordaje específico, lo que subraya la complejidad del problema. ¿Estamos dispuestos a asumir la responsabilidad que nos toca?

En este contexto, resulta fundamental que la comunidad tome un rol activo. “La responsabilidad individual de mantener los espacios limpios debe ser complementada con programas de sensibilización y educación ambiental que fomenten una cultura de cuidado colectivo”, advierten los especialistas. En ocasiones, muchos de los basurales vuelven a formarse a los pocos días o porque los vecinos arrojan los residuos en el lugar o porque falla el sistema de recolección en algunas áreas. “Cuando trabajamos junto a los vecinos, la intervención se fortalece. Recibimos denuncias a través de WhatsApp y videollamadas, y podemos detectar camionetas y empresas que incumplen las normas sobre disposición de residuos”, agregó Migliavaca en la misma entrevista. La secretaria explicó que la municipalidad implementa medidas estrictas contra aquellos que incumplen las normas. “Hemos sancionado empresas que arrojaban residuos, y en algunos casos, hemos secuestrado vehículos que no respetaron las disposiciones sobre basura en la vía pública”, precisó.

Como comunidad, el Gran San Miguel de Tucumán debe reconocer que el problema de los microbasurales no es un desafío aislado, sino un reflejo de la relación fracturada con su entorno. Incluso entre las mismas ciudades que integran el área metropolitana.

Repararla no solo mejorará la calidad de vida de sus habitantes, sino que también sentará las bases para un futuro más sostenible.

Comentarios